Ocho mujeres 'ofician' misa en Les Garrigues al faltar sacerdotes

Ocho mujeres laicas en misión pastoral se encargan de “oficiar” misa en pueblos de Les Garrigues y el Urgell ante la falta de sacerdotes. En la actualidad, hay dos curas para atender 18 poblaciones de ambas comarcas por lo que estas mujeres tienen el permiso del arzobispo de Tarragona, Joan Planellas, para “celebrar la palabra” y dar la comunión, previa consagración del pan y el vino por parte del mosén y, de esta manera, ayudar a los clérigos en sus labores pastorales. Una de ellas es Concepció Motlló, de Arbeca.

Tiene 71 años, está casada y tiene hijos y hace 10 años que se dedica a respaldar la labor de los párrocos. “El anterior arzobispo de Tarragona, Joan Planella, me confirió la potestad que me renovó el actual, Jaume Pujol. Desde entonces voy y vengo por distintas parroquias donde transmito la palabra de Dios, un día en Arbeca, otro en L’Espluga Calba, otro en Els Omellons, pero también en Belianes o Sant Martí de Maldà.

Allí donde me digan que hace falta”. “No hay suficientes sacerdotes y hay que buscar soluciones rápidas a este problema”, asegura. Considera que las mujeres efectúan esta tarea con dignidad.

“Algunas son solteras o viudas y esta labor nos realiza”, dice. En el obispado de Lleida hay, en la actualidad, 18 animadores de comunidad de los que 12 son hombres y 6 mujeres, 9 menos que hace dos años cuando eran 27 y las mujeres 14. Hacen labores pastorales en colaboración con el rector de la iglesia y también pueden celebrar la palabra y comulgar con permiso del obispo y en situaciones extraordinarias como atender enfermos o en ausencia del párroco.

En la Vall del Llobregós, en la Segarra, mosén Fermí Manteca tiene el respaldo de un laico para atender sus cinco parroquias. En el obispado de Urgell no hay ninguna mujer pero sí tres diáconos que con permiso de la iglesia celebran bautismos, exequias y matrimonios y pueden estar casados. Están en Balaguer y Les Avellanes, Ponts y Bellver, informa C.S

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