Dr. Fernando Pifarré: "el ciclista de fin de semana que desayuna fuerte es el prototipo más habitual de sufrir una muerte repentina"
Pruebas médicas recomendadas y factores de riesgo a tener en cuenta para prevenir incidentes cardiovasculares
Medio Maratón de Lleida 2024
La práctica deportiva, especialmente en aficionados, puede asociarse a un mayor riesgo de arritmias y muerte repentina, tal como puso de relieve el reciente caso de un corredor de 39 años que sufrió una parada cardiorrespiratoria en la Media Maratón de Lleida. Según el Dr. Fernando Pifarré, jefe del servicio de Medicina de l'Esport de la Generalitat en Lleida, los deportistas aficionados tienen cuatro veces más riesgo de muerte repentina que la población general.
Para prevenir estos incidentes, el Dr. Pifarré recomienda que los deportistas aficionados se realicen una prueba de esfuerzo anualmente y un ecocardiograma cada dos años. "Son pruebas asequibles, con un coste similar al de unas zapatillas de correr, que aportan mucha tranquilidad si los resultados son normales", señala. Además, aconseja entrenarse de forma progresiva y controlada, evitando esfuerzos de alta intensidad sin una preparación adecuada.
Causas más frecuentes de muerte repentina según la edad
El Dr. Pifarré explica que, en Europa, en mayores de 35 años la causa más frecuente es la enfermedad ateromatosa coronaria, asociada a niveles altos de colesterol. En cambio, en menores de 35 años predomina la displasia arritmogénica del ventrículo derecho. En los Estados Unidos, la miocardiopatía hipertrófica es la patología más habitual.
Factores de riesgo: el "ciclista de fin de semana"
"El prototipo de riesgo de enfermedad ateromatosa coronaria sería el ciclista de fin de semana que se traga un desayuno fuerte de tenedor", afirma Pifarré. Este perfil combina varios factores de riesgo: edad superior a 35 años, práctica deportiva intermitente e intensa, y hábitos alimentarios poco saludables.
Recomendaciones para deportistas aficionados
En resumen, el Dr. Pifarré aconseja a los deportistas aficionados:
- Realizar una prueba de esfuerzo anual y un ecocardiograma bianual
- Entrenarse de forma progresiva y controlada
- Evitar esfuerzos intensos sin preparación adecuada
- Mantener unos hábitos de vida saludables, especialmente en cuanto a alimentación
Con estas medidas preventivas, se puede disfrutar de los beneficios del deporte minimizando los riesgos cardiovasculares asociados. Ante cualquier síntoma de alarma durante la práctica deportiva, hace falta detenerse y consultar a un médico.
