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AGRICULTURA

Precio ruinoso de la fruta de hueso, arrastrado por la de baja calidad

Los payeses temen no cubrir de nuevo costes de producción y critican la actitud de la gran distribución|| Llamadas a que el sector marque normas de comercialización

Los precios de la fruta de hueso no cubren los costes de producción, según los payeses.

Los precios de la fruta de hueso no cubren los costes de producción, según los payeses.SEGRE

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Las organizaciones agrarias han dado la voz de alarma ante la situación que atraviesa el mercado de la fruta de hueso, en el que melocotones, nectarinas y paraguayos cotizan a unos niveles que puede volver a situar sus balances en números rojos.

Buena parte del problema viene derivado de que la fruta de poca calidad está arrastrando a la baja los precios de las mejores partidas. Además, las grandes cadenas de distribución, capitaneadas por las de mayor volumen europeas, están forzando precios a la baja, a pesar de que no existe una gran cosecha.

El responsable del sector de la fruta de Unió de Pagesos, Xavier Gorgues, explicó este lunes que no existen grandes volumenes de calibres grandes y que, pese a ello, están cotizando a precios muy reducidos. Asegura que en algunas variedades tempranas ha podido haber sobreoferta de fruta de pequeño tamaño y ha arrastrado a la baja a toda la fruta.

El informe anual sitúa la previsión de precios “casi al mismo nivel que antes de la crisis de 2007-2008”

En este contexto, el sindicato reclama una reunión del sector, en el que estén presentes las organizaciones agrarias, las cooperativas a través de la FCAC y la patronal Afrucat. Se trataría, dijo, de “poder comenzar a usar la extensión de norma y regular la producción.

Tenemos un instrumento y deberíamos usarlo”, dijo. Se refería así la hecho de que está aprobada la circunscripción económica de la fruta de hueso, capitaneada por Afrucat, lo que permitiría marcar reglas de obligado cumplimiento para todo el sector.

Desde JARC-COAG, David Borda, recuerda que años atrás se pidió a los agricultores que optaran por producir calidad para conseguir valor añadido. “Lo hemos hecho, nos resulta más caro producir calidad y ahora no está valorada en el mercado. La fruta de mala o baja calidad no deja subir el precio de la buena”, se lamenta.

En este punto carga las tintas contra la gran distribución porque “solo buscan precio, precio, y precio y no calidad”. En el caso de la exportación afirma que llevan la voz cantante en el mercado las que califica como “tres mostruos europeos”, la británica Texco y las alemanas Lidl y Aldi”, que marcan el paso de los precios. asegura.

El presidente de Asaja Lleida, Pere Roqué, pone el acento en que no hay exceso de oferta en el mercado porque “todo lo que se recoge en las fincas se vende, no hay estocks en las cámaras”. Con esta fluidez en las ventas, no entiende los bajos precios.

Los últimos datos del Observatorio de Precios de la Generalitat valora las nectarinas de mayor calibre (80-90) a 73 céntimos el kilo, por ejemplo. Roqué afirma que hay que tener en cuenta que se trata de precios salidos de central.

Si se descuentan gastos como los de envasado, asegura que el agricultor apenas cobraría entre 35 y 37 céntimos el kilo. Eso hablando de calibres muy grandes, que no abundan en muchas fincas. En melocotones, los mismos calibres se valoran en torno a lo 68 o 69 céntimos, mientras en paraguayos llegaría a 72.

Otras fuentes del sector consultadas este lunes apuntaban a que, aunque aún queda buena parte de la campaña para la fruta de hueso, se calcula que las cotizaciones promedio para los agricultores pueden rondar los 30 céntimos. Buena parte de esta mala campaña se explica, según las fuentes, en el pésimo inicio en Murcia en primavera con fruta de calidad mediocre.

FAO y OCDE prevén bajos precios para los alimentos Los precios de la mayoría de los alimentos básicos descenderán ligeramente durante la próxima década debido al crecimiento a un ritmo más lento de la demanda mundial, destacaron este lunes la FAO y la OCDE. En su informe anual sobre perspectivas agrícolas, la Organización de la ONU para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) apuntaron que la demanda de alimentos crecerá entre 2017 y 2026 con más lentitud que en los diez años precedentes. Este factor contribuirá a mantener bajos los precios de los alimentos y, en el caso de los cultivos, los pondrá a “casi el mismo nivel de antes de la crisis de 2007 y 2008” (marcada por las subidas repentinas), señaló en una conferencia conjunta el secretario general de la OCDE, Ángel Gurría. Se calcula que los precios de los alimentos básicos se mantendrán por debajo de los picos que se han registrado durante la última década en un contexto de máxima producción y abundantes suministros de la mayoría de esos productos. El informe subraya que el ritmo de crecimiento de la demanda mundial caerá a la mitad en la mayoría de los productos básicos, incluidos los cereales, la carne, el pescado y el aceite vegetal.

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