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GANADERÍA EMPRESA

La Cooperativa d'Ivars aumenta un 11% el consumo de pienso propio

En ocho años, hasta alcanzar las 302.337 toneladas || El Grupo Jorge apuesta por la “eficiencia” y la “excelencia” para consolidarse en mercados “más exigentes”

Un momento de la conferencia de Llanes, Gómez y Cassanyé, ayer, en La Llotja.

Un momento de la conferencia de Llanes, Gómez y Cassanyé, ayer, en La Llotja.ISMAEL CHIVA

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La Cooperativa d’Ivars ha incrementado un 10% el nivel de autoabastecimiento de piensos entre 2012 y 2018, según explicó ayer Núria Llanes, responsable de nutrición de esta entidad del Pla d’Urgell, en la segunda y última jornada del PorciForum, que tuvo lugar en La Llotja de Lleida. En este sentido, hace ahora seis años, producía 291.135 toneladas de pienso, que venían a representar el 18,6% del total consumido por las granjas de los cooperativistas. En contraste, en el ejercicio de 2018, la producción de pienso para abastecer las explotaciones de la entidad alcanzó las 302.337 toneladas, que cubrieron el 29,4% del total de pienso empleado. Al hilo de esto, Llanes explicó que la Cooperativa d’Ivars trabaja para mejorar y potenciar el consumo de proximidad y el autoabastecimiento, con el objetivo de fortalecer la economía de proximidad y disminuir la huella de carbón, “porque no es lo mismo transportar el cereal 4 kilómetros que importarlo de lugares alejados”. Igualmente, Llanes subrayó la importancia de “potenciar” las segundas cosechas de cereal. Así, remarcó que el maíz de segunda cosecha, que se planta en verano y se recolecta en noviembre, sirve para elaborar el pastone con el que se abastecen las granjas. Por otro lado, puso el acento en que la Cooperativa d’Ivars también ayuda a los ganaderos a “mantener y renovar” explotaciones.

Mientras tanto, José Antonio Gómez, directivo del Grupo Jorge, explicó que la compañía aragonesa, propietaria del matadero The Fortune Pig, situado en Mollerussa, apuesta en la actualidad por lograr la “excelencia” a fin de consolidarse en mercados “más exigentes”. En este sentido, relató que buscan establecer una relación de “confianza” con el consumidor a partir de los certificados de calidad que han obtenido durante los últimos años. No obstante, admitió que, por lo general, “los consumidores no están dispuestos a pagar por la calidad, siempre buscan el precio mínimo”. Gómez, al respecto, recordó que mayores exigencias en sanidad animal o en calidad repercuten en un encarecimiento del precio de venta al público.

Por otra parte, Antonio Cassanyé, gerente de Gescaser y de la Granja Cassanyé de Almacelles, explicó que su objetivo es lograr que sus instalaciones lleguen a la máxima eficiencia. “No queremos levantar más granjas, queremos que cada proceso del ciclo sea eficiente a un coste lo más bajo posible”, manifestó. Igualmente, remarcó que buscan obtener un producto diferenciado y que su principal reto de futuro son alcanzar una mayor calidad en sus productos.

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