ESNOTICIA
El campo grita ¡basta!
Unas 3.000 personas y 500 tractores ocupan el centro de Lleida para protestar por la crisis de la payesía || Unidad del sector para exigir a todas las administraciones soluciones “inmediatas”
Decenas de tractores estacionados en la avenida Madrid de Lleida, ayer.
El campo de Lleida y La Franja protagonizó ayer una manifestación histórica en la capital del Segrià, en la que participaron unas 3.000 personas y 500 tractores, para protestar contra la grave situación que atraviesa uno de los motores económicos de Ponent. Después de años de crisis, agricultores y ganaderos dijeron “¡basta!”
El sector primario de las comarcas de Lleida y La Franja impartió ayer una lección de unidad en la capital del Segrià en una movilización histórica que reunió a miles de personas para protestar por la crisis que sufre la payesía desde hace años y que ha llevado al límite a agricultores y ganaderos. Bajo el lema “Salvem la pagesia, defensem el món rural” y con un lazo verde como símbolo distintivo, unos 3.000 payeses y 500 tractores lanzaron un SOS a las administraciones catalana, española y europea para que busquen soluciones “inmediatas” que reviertan la delicada situación por la que pasa un sector que representa el 10% del PIB de la demarcación (más información en la página 5).
A primera hora de la mañana, cinco columnas de tractores salidos desde varios puntos de Ponent entraron en la ciudad de Lleida convergiendo en el Pont Vell. Los tractoristas ocuparon por completo este paso sobre el Segre, así como buena parte de la Rambla Ferran y de las avenidas Macià, Blondel y Madrid. Desde allí se dirigieron a pie a la Plaça Sant Joan, que se quedó pequeña para acoger a todos los payeses que salieron a la calle para denunciar los “20 miserables céntimos” que les hacen perder dinero en la fruta, por ejemplo. “Nuestra dignidad no vale 20 céntimos, ni la juventud se queda en el pueblo por 20 céntimos”, sentenció desde la tribuna de oradores Jordi Vidal, presidente de la Plataforma en Defensa del Sector de la Fruta. “La única bandera que vale es la del euro y, si esto va de democracia, todos los presentes somos unos esclavos”, concluyó. Por su parte, el alcalde de Alcarràs, Manel Ezquerra, hizo de portavoz de los 115 municipios que se han adherido al manifiesto de la marcha, que urge a tomar medidas para dar viabilidad a las explotaciones familiares, “modelo económico de nuestras comarcas”.
Cuando la cabecera de la manifestación terminaba el recorrido, los últimos tractores la comenzaban
Al término del acto, en el que intervinieron dirigentes de organizaciones agrarias, de cooperativas y de Afrucat, los concentrados se dirigieron al Arc del Pont para comenzar la manifestación.
Bajo la atenta mirada de Indíbil y Mandoni, y fieles a su espíritu combativo, los payeses pusieron rumbo al Pont de la Universitat con ánimo de hacer oír su voz. Detrás de ellos, un mar de tractores haciendo sonar sus bocinas puso la banda sonora a una de las movilizaciones más importantes del campo que se recuerdan en Lleida. Cuando la cabecera de la marcha, en la que no se vio a casi ninguno de los políticos que asistieron a la convocatoria, como la consellera de Agricultura, Teresa Jordà, el subdelegado del Gobierno central, José Crespín, el presidente de la Diputación, Joan Talarn, o el presidente de la comisión de Agricultura del Parlament, Marc Solsona, regresaba por el Pont Vell, los últimos tractores empezaban su andadura por Blondel. Con Els Segadors y su “bon cop de falç defensors de la terra” se puso fin a una convocatoria de éxito.
