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Las mujeres son el 49% de la población de la provincia de Lleida pero apenas dirigen el 28% de las explotaciones agrícolas

Maria Casoliva, en su explotación del Mas Pinyol en Sanaüja.

Maria Casoliva, en su explotación del Mas Pinyol en Sanaüja.XAVIER SANTESMASSES

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Hoy día 15 de octubre se celebra la Jornada Internacional de la Mujer Rural, una conmemoración instaurada por las Naciones Unidas para visibilizar la presencia femenina en el sector más básico para la subsistencia de la raza humana debido a que, sin los alimentos que se cultivan, las personas morirían de inanición.

Como ha sucedido en otros ámbitos, el papel de la mujer rural se ha sido invisibilizado por el machismo dominante en la sociedad. Así, hoy en día, a pesar de que las féminas representan poco más del 49% de la población leridana, las explotaciones agrícolas dirigidas por mujeres en la provincia solamente ascienden al 28,94% del total de las que son gestionadas por personas físicas.

El número es de 5.763 mujeres frente a 14.148 hombres, según los datos que baraja la conselleria de Acción Climática, Alimentación y Agenda Rural referidos al año pasado..

Esta proporción refleja que, en el mundo rural, todavía queda un largo camino por recorrer a fin de alcanzar la igualdad entre mujeres y hombres.

Más aún cuando, en un año, el porcentaje de payesas solamente ha aumentado en un cuarto de punto, desde el 28,69% que reflejaba el dato de 2019 hasta el 28,94% de 2020. Lo ha hecho, sin embargo, a costa del descenso en la cifra de personas físicas titulares de explotaciones agrícolas, que en doce meses, se ha reducido en 485.

Del total, eran mujeres 89 de las que han dejado de comandar una explotación, mientras que el resto, 396 personas, eran hombres.

Por comarcas, la Alta Ribagorça y el Pallars Jussà son las áreas en que las féminas ocupan más, en términos porcentuales, la dirección de explotaciones agrícolas, rondando el 35% del total. En las antípodas se sitúa el Alt Urgell, con 71 mujeres payesas, el 22,68%, ante 242 hombres.

Por su parte, Aran solamente registra dos mujeres como titulares de explotaciones agrarias, el 11,11 por ciento.

Más allá de la feminización del campo, también está sobre la mesa la cuestión del relevo generacional. Y es que 3.045 de las leridanas payesas tienen más de 65 años, el 52,84% del total. En comarcas como la Segarra, este porcentaje se incrementa hasta el 65,22%.

En cambio, solo 325 de las payesas de la provincia, el 5,64% del total, son menores de 41 años. Teniendo en cuenta estos datos, queda demostrado que es más importante que nunca dar visibilidad a la labor que las mujeres realizan en el entorno rural.

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