Los ERTE en la fruta afectan a 241 trabajadores en Lleida

El departamento de Trabajo de la Generalitat ha tramitado hasta el momento un total de 24 expedientes de regulación de empleo (ERTE) de cooperativas y centrales frutícolas de Lleida gravemente afectadas por la caída de la producción tras las heladas de abril. Así lo explicó ayer el delegado de la conselleria en Lleida, Vidal Vidal, que dijo que afectan a un total de 241 trabajadores en la provincia y están tramitados por “fuerza mayor”, siendo así similares a los que se pusieron en marcha durante la pandemia. Entre otras cosas, supone que los trabajadores afectados no consumen período de derecho a cobrar prestaciones por desempleo, a pesar de que durante un período reciban las prestaciones por parte del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE), dentro del plan de medidas articuladas por el Govern ante las graves consecuencias de las heladas del pasado mes de abril.

El frío arruinó el 70% de la cosecha de fruta de hueso y más del 26% de la de manzana y pera. Entre las empresas que han presentado este tipo de expedientes para intentar afrontar la situación se encuentra Fruits de Ponent, con entre 110 y 120 trabajadores afectados, la práctica totalidad de la plantilla, según explicó su director general, Josep Presseguer. Afecta al Grupo cooperativo y la cooperativa de Alcarràs, pero no así a Ramel (energética) ni Coagra (transporte), tampoco a la entidad de Benavent ni a unos tres o cuatro personas destinadas en el molino de aceite y algún servicio directo de cereal.

El ERTE se aplicará a todos los trabajadores, incluido el equipo directivo, desde el lunes hasta el 28 de febrero próximo durante la mitad de su jornada, mientras que la cooperativa garantiza que el personal no perderá poder adquisitivo al pasar a cobrar parte de sus ingresos del SEPE. Fruits de Ponent apenas ha tenido entre un 20 y un 25% de producción de fruta de hueso este verano, razón por la que se ha visto forzada a tomar esta medida. Por otra parte, el Consejo de Ministros aprobó ayer, a propuesta del ministerio de Agricultura, un real decreto por el que se establecen las bases reguladoras para la concesión de ayudas estatales de mínimis destinadas a las centrales de fruta afectadas por las heladas con un importe total en el Estado de 12,05 millones de euros.