El ‘rambo de la Cerdanya’, ingresado en el psiquiátrico debido a su estado

Martí Cots Saleta, el delincuente histórico conocido ‘Rambo de la Cerdanya’ que fue detenido de nuevo este lunes, permanecía ayer ingresado en la unidad psiquiátrica del hospital Santa Maria de Lleida. Los forenses recomendaron su ingreso debido a su “alterado estado mental”, según informaron ayer fuentes judiciales. Estaba previsto que pasara a disposición el martes en el juzgado de guardia de La Seu d’Urgell pero se decidió posponerlo, según informaron las mismas fuentes. Mañana podría declarar ante el juez de guardia.

Este vecino de Bellver de Cerdanya de 47 años fue detenido el lunes por los Mossos d’Esquadra depués de que el viernes pasado se fugara del centro Sant Joan de Déu de Almacelles donde, al parecer, estaba ingresado voluntariamente. No regresó de un permiso terapéutico, según fuentes del centro. Supuestamente ese mismo día robó un coche en un pueblo de la Franja y el sábado atracó una gasolinera en Riu de Cerdanya. Iba armado con una escopeta de caza y vestido con ropa militar, uno de los aspectos característicos de sus asaltos, por lo que se le llama ‘Rambo de la Cerdanya”. Los Mossos d’Esquadra le acusan de los delitos de robo, hurto de uso de vehículo a motor, hurto y robo con intimidación. El arresto se produjo en la zona del refugio de Cortals de l’Ingla, en Bellver de Cerdanya, donde suele esconderse.

Cots Saleta había salido de la cárcel el pasado mes de julio y, al parecer, había ingresado voluntariamente en Sant Joan de Déu. Tiene un largo historial delictivo. En julio del 1992 “secuestró” a dos parejas de Barcelona en un refugio de La Cerdanya. Por aquel entonces, dictámenes forenses dictaminaron que pese a tener 28 años tenía una mentalidad de 13 y que se sentía más inteligente que la media del resto de españoles. En 2001 se le contabilizaban más de una veintena de delitos, entre ellos varios atracos. Subsistía cazando por las montañas y dormía en el bosque dentro de los vehículos que robaba. Cuando no tenía comida, robaba en casas para proveerse. En una de las detenciones, pidió a los agentes que llamaran al presidente de Estados Unidos porque le indultaría.