Balaguer tranquiliza a los vecinos tras el brote de sarna en un geriátrico

El alcalde de Balaguer, Jordi Ignasi Vidal, quiso tranquilizar ayer a los vecinos de la capital de la Noguera ante la alarma que ha generado el brote de sarna que ha obligado a tratar a un centenar de personas, entre usuarios y empleados, de la residencia para ancianos Comtes d’Urgell (ver SEGRE de ayer). El alcalde afirmó que “no es una enfermedad de fácil contagio” y destacó que ya se están aplicando las recomendaciones habituales para el control de este tipo de brote, como son el aislamiento de las personas afectadas (se ha dado la baja a los trabajadores), la limitación de las visitas y el inicio del tratamiento (apliación de pomada de permetrina) a los contagiados y al resto de personal y usuarios del centro. El Servicio de Vigilancia Epidemiológica y Respuesta a Emergencia de Salud Pública en Lleida informó el lunes que, a raíz de la sospecha de casos de escabiosis (sarna) en el geriátrico, se realizó la semana pasada una inspección del centro y la exploración de los casos sospechosos, confirmando un brote de esta enfermedad contagiosa que ha afectado, según datos preliminares pendientes de completar el estudio, a una decena de personas, de las que la mitad son empleados y la otra mitad, usuarios. No se descarta que la cifra pueda aumentar en los próximos días. Una anciana que llegó a la residencia en junio procedente de Barcelona fue la primera en contraer la enfermedad.

Por otra parte, la residencia está gestionada desde el pasado mes de mayo por la empresa Eulen Servicios Sociosanitarios. Este diario publicó ayer por error que la gestiona la Fundació Pere Mata porque así lo decían tanto la página web del centro geriátrico como la de la propia fundación.