SEGRE

AGRICULTURA INICIATIVAS

La Segarra recupera los manzanos

Maria Casoiiva en su campo de frutales en la población de Sanaüja, en la comarca de la Segarra.

Maria Casoiiva en su campo de frutales en la población de Sanaüja, en la comarca de la Segarra.

Publicado por

Creado:

Actualizado:

Maria Casoliva, una joven agricultora licenciada en Ciencias Ambientales de Mas Pinyol, en Sanaüja, ha introducido en la comarca la plantación de manzanos como cultivo alternativo al cereal que domina en la comarca. Es la primera plantación de manzanas que se conoce en el territorio, si bien familiares de Casoliva explican que hace 40 años lo intentó, sin éxito, con una plantación de 6 hectáreas la vecina masia de Les Torres. El proyecto ha arrancado con la plantación de 2.800 árboles junto a la masia. La iniciativa ha sido de la cooperativa comercializadora Fruits de Ponent, con el apoyo del alcalde de Sanaüja, Josep Condal. Según Casoliva, la cooperativa busca una producción de manzanas con valor añadido ya que esta fruta se está perdiendo en el llano de Lleida en favor de otras como la nectarina o la pera. La mayor altura sobre el nivel del mar y el contraste térmico de las temperaturas de la Segarra permiten un fruto de calidad. De momento, en la primera cosecha se consiguieron 16.000 kilos y se espera este año ya en plena producción llegar a los 50.000.

Los principales escollos están en la compra de maquinaria, inviable para una producción tan pequeña; la mano de obra, de forma inicial cuenta con el apoyo familiar; y finalmente, la zepa (zona especial de protección de aves) que le impide poder regar en las tierras donde tenía previsto los 6.000 metros cúbicos de agua por hectárea y año que requiere la producción.

La plantación tiene 2.800 árboles y en la primera cosecha se han producido 16.000 kilos

Inicialmente Maria Casoliva, ha constituido la cooperativa Agrària del Llobregós con otro agricultor, Gerard Cases, de la población vecina de Ribelles, en la Noguera; de un lado para poder comercializar la manzana, y de otro, para conseguir que se sumen al proyecto más agricultores. Casoliva desconoce la viabilidad del proyecto. “De momento estamos en fase experimental”, por lo que la base de la economía familiar siguen siendo las granjas y la producción de cultivos extensivos.

Pese a todo, está satisfecha con la marcha del proyecto, entre otras cosas porque la viabilidad de los cultivos extensivos cada vez está más en duda en las zonas de riego.

Una activista cultural que quiere mantener la tradición Si bien Maria Casoliva es originaria de Sanaüja, hace solo unos años que ha vuelto a su entorno rural después de vivir una década en Girona. La formación en la especialidad de las manzanas ha corrido a cargo de Fruits de Ponent. La joven, además es una activista cultural, es una de las responsables del grupo de Castellers de Guissona que este año celebra su décimo aniversario. La producción de manzana en la Segarra tiene su anécdota en el hecho que el libro de Vidal Vidal dedicado a la comarca lo titula precisamente “El país de les Pomes”. Según el escritor, la comarca antes de ser tierra de frontera había sido una zona de frondosa vegetación por lo que no se descarta la producción de esta fruta. Según Vidal Vidal, el topónimo viene del euskera en el que ‘sagar’ es el topónimo de manzana, ‘sagardi’ de manzaneros y ‘sagarresi’ el de país de las manzanas.

tracking