El agua ya inunda fincas en L'Albagés, cuya presa está lista pero no se llenará hasta 2018

La presa de L’Albagés, de 86 metros de altura y construida con tierra compactada, está lista desde diciembre y solo faltan trabajos como caminos de mantenimiento, tuberías para la toma de riego o los desagües de fondo y una caseta para darla por concluida totalmente. Sucederá el próximo mayo, pero no será hasta dentro de un año, en primavera de 2018, cuando podrá comenzar a llenarse aprovechando sobrantes de agua y una vez aprobado el plan de emergencia y el de puesta en carga del embalse. Sin embargo, el agua ha comenzado a inundar fincas del lecho del embalse. Se trata del agua procedente del propio canal Segarra-Garrigues (derivada a la vez del pantano de Rialb) y del lángido río Set, donde Acuaes, la empresa pública estatal responsable del canal principal y el pantano, había habilitado minipresas para contener agua necesaria para las obras. Estas aguas y las de la lluvia de este invierno han acumulado unos 150.000 metros cúbicos, según fuentes de la obra, visibles en el lecho del pantano y que dan una idea del paisaje futuro de L’Albagés. El calendario oficial señala también que la presa estará un año en pruebas y será operativa en primavera de 2019, cuando servirá para regar las 8.000 hectáreas de cultivos que dependen de esta zona en el canal.

Sin embargo, la red de distribución del agua para el riego de los cultivos de Les Garrigues no está aún construida. La Generalitat no ha iniciado aún la promoción del riego en esta zona.

Las reservas de nieve del Pirineo llenarían 10 veces Oliana Las cabeceras de los ríos Segre, Valira, Noguera Pallaresa, Ribagorçana y Garona suman 882 hectómetros cúbicos de agua en forma de nieve de los que la mitad o más irán a parar a los ríos por escorrentía. Esta cifra es casi el doble de las reservas de nieve del año pasado por estas fechas (469 hectómetros) y supone 10 veces el pantano de Oliana, con capacidad para 84 hectómetros cúbicos de agua. Llenaría, asimismo, dos veces Rialb. Si se repitieran estas reservas, sería fácil que la primavera de 2018 pudiera llegar el agua de Rialb al pantano de L’Albagés a través del Segarra-Garrigues para comenzar la carga del nuevo embalse. El llenado depende del agua sobrante.