Seis pueblos del Baix Segre se unen y crearán una marca para explotar el turismo floral

Los ayuntamientos del Baix Segre, en concreto los de Aitona, Alcarràs, Torres de Segre, La Granja d’Escarp, Seròs y Soses, están dispuestos a crear una mancomunidad y una marca única para promocionar el turismo en torno a los árboles frutales en flor que cada primavera atrae a numerosos turistas al llano. En los últimos años esta actividad ha experimentado un “boom” con más de 6.000 personas en los campos floridos del llano durante el mes de marzo. Muchos de los alcaldes de la zona han visitado el valle del Jerte, en Cáceres, famoso por sus fincas de cerezos, una experiencia perfectamente extrapolable a Lleida. Además los alcaldes leridanos aseguran que en el Baix Segre la diversidad cromática de color (del blanco a diversos tonos de rosa) todavía es mucho más acusada. El alcalde de Torres de Segre, Josep Ramon Brazuela, indicó que “debería ser la Diputación, a través del Patronato de Turismo, la que aglutinara a los municipios y definiera una línea de actuación común para todos”, ya que la disposición de todos los consistorios para abordar la iniciativa existe “y solo es cuestión de poner hilo a la aguja”.

Aitona ha sido la pionera en potenciar el “fruiturismo”, algo en lo que lleva inmersa hace cinco años. De mostrar y explicar cómo florecen los árboles se encargan los propios payeses, las amas de casa de la localidad y algunos jóvenes con estudios relacionados. De hecho, el consistorio ya organizó hace dos años cursos de formación para esta veintena de personas que explican el proceso hasta la floración a un público cada vez más variado. De hecho, han llegado a venir visitantes japoneses, verdaderos expertos en materia floral, e incluso la televisión rusa. Su alcaldesa, Rosa Pujol, puntualizó que el objetivo es conseguir que el turismo no se focalice en los tres fines de semana de marzo y que se pueda seguir todo el proceso desde la preparación de los campos frutales hasta la recogida. Pujol indicó que lograr esta marca mancomunada será un incentivo económico para la comarca.

Una actividad que se explotará todo el año en AitonaAitona trabaja para que el turismo relacionado con la fruta pueda ofrecer actividades todo el año, no solo la floración. Así, en otoño e invierno se mostraría la preparación y poda del árbol y en primavera y verano la floración y el proceso de maduración y recolección de la fruta.