SEGRE

DEMOGRAFÍA

80 medidas contra la despoblación

La FEMP propone actuaciones contra el retroceso demográfico y Europa estudia implantar algunas de ellas en las políticas de cohesión de la UE que se empezarán a aplicar a partir de 2020

La comisión de Desarrollo Regional del Parlamento Europeo, que se reunió el martes.

La comisión de Desarrollo Regional del Parlamento Europeo, que se reunió el martes.X.R.

Creado:

Actualizado:

La Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) ha puesto sobre la mesa sus 80 propuestas contra la regresión demográfica en el segundo congreso sobre despoblación que ha celebrado esta semana en Huesca.

La FEMP explica que la “regresión demográfica se ha convertido en un problema de Estado” y que la despoblación del medio rural es una de las realidades de este retroceso, que se ve agravada por la baja natalidad, el envejecimiento de la población y las migraciones hacia ciudades o núcleos más grandes.

Para conseguir paliar sus efectos, proponen medidas como establecer bonificaciones o deducciones en los impuestos, poner en marcha una estrategia estatal para luchar contra esta problemática, incorporar en los presupuestos un plan sobre demografía, revisar el modelo de financiación de las entidades locales o garantizar el acceso al sector bancario, entre otras.

Casi un centenar de pueblos situados en el llano han perdido población durante los últimos 25 años

Además, durante el congreso, la FEMP ha pedido pasar “de las palabras a los hechos” y que se empiecen a cumplir sus 80 medidas y, por su parte, los gobiernos locales pidieron al Estado una ley específica para frenar la despoblación. En este sentido, en el pleno de la Diputación de Lleida de ayer se aprobaron mociones para asegurar la prestación de servicios en municipios pequeños.

En Lleida, el problema de la despoblación puede afectar a más de la mitad de las localidades, que tienen 500 vecinos o menos, y casi un centenar de pueblos del llano han perdido población en 25 años.

En Les Garrigues, una veintena de pueblos han visto cómo se reducía su población entre 1991 y 2016. Para defender las necesidades de estas pequeñas localidades, entidades como la Associació de Micropobles de Catalunya, que reúne a 44 municipios de Lleida, quieren mejorar la capacidad de gestión de sus consistorios y la calidad de vida de los ciudadanos.

Además, 17 municipios del Pirineo tienen representación en Esmontañas, asociación que defiende el desarrollo económico y lucha contra la despoblación de zonas de montaña.

Cabe recordar que Europa estudia medidas para reducir los efectos de la ‘crisis’ demográfica, que se aplicarán en las políticas de cohesión a partir de 2020. El martes se presentó en la comisión de Desarrollo Regional del Parlamento Europeo una propuesta de resolución de la presidenta de la delegación socialista, Iratxe García, donde se pide más inversión para fijar a la población. Sergio Gutiérrez, diputado socialista europeo, afirmó que es necesario invertir “ahora que estamos a tiempo o posiblemente lleguemos tarde para las próximas décadas”.

Las propuestas

  1. Instituciones y financiación. Poner en marcha una estrategia estatal que podría llegar a desplegar políticas de repoblación, crear un mapa de zonas prioritarias, revisar el modelo de financiación y promover que la gestión de los fondos europeos destinados al mundo rural esté liderada por los gobiernos locales.
  2. Economía y empleo. Bonificaciones en los impuestos de actividades profesionales y empresariales así como en el IRPF, planes de apoyo a autónomos y emprendedores rurales, nuevos planes de empleo local a través de las diputaciones y consistorios y adaptar el Plan de Garantía Juvenil a la realidad rural.
  3. Infraestructuras y transportes Analizar la red viaria y realizar un mapa de distancias para el acceso a los servicios básicos y las grandes infraestructuras para establecer prioridades de actuación, establecer objetivos dentro de los presupuestos de cada autonomía y revisar los modelos de transporte público.
  4. Servicios públicos y sociales. Garantizar los servicios públicos para los ciudadanos y analizar las dificultades de acceso, establecer fondos presupuestarios para estos servicios, potenciar los servicios sociales y la incorporación de nuevas tecnologías, además de asegurar el acceso a la educación de 0 a 3 años.
  5. Facilidades para las viviendas. Reforzar y personalizar las subvenciones para comprar y rehabilitar viviendas que sean primeras residencias, promover los planes de regeneración urbanística para pequeños municipios y elaborar planes de acceso a la vivienda y rehabilitación en zonas de prioridad demográfica.
  6. Incentivos en la demografía. Instar a las administraciones públicas a establecer ayudas especiales para incentivar la natalidad que podrán tener en cuenta las características de los espacios rurales y estudiar bonificaciones en los impuestos para las familias que tengan hijos residentes en el mundo rural.
  7. Cultura, identidad y comunicación. Mejorar la comunica c ión de la realidad territorial del mundo rural y potenciar su difusión con estrategias territoriales de comunicación, poner en valor la lucha contra la despoblación como fuente de riqueza patrimonial, económica y medioambiental para el conjunto del país.

La vida en los pueblos 121 municipios de Lleida, por debajo de 500 habitantes. En Lleida hay 121 municipios (un 52%) con menos de 500 vecinos. De todos ellos, según el INE, 14 se encuentran por debajo de 100: Arres, Arsèguel, Bausen, Cabanabona, Cabó, Canejan, Cava, Esterri de Cardós, Fulleda, Montornés de Segarra, Nalec, Riu de Cerdanya, Tarrés y Tiurana. Además, el 71,4% de las localidades tienen menos de 1.000 habitantes, un dato que la FEMP usa para definir pueblos en peligro.  Proyectos para ‘resucitar’ pueblos abandonados. A pesar de los problemas de despoblación que se detectan en las zonas rurales leridanas, desde los últimos años han surgido proyectos para ‘resucitar’ algunos pueblos. Uno de ellos es Reviure Solanell, que quiere dinamizar este pueblo del Alt Urgell donde actualmente hay tres empadronados. En el Urgell, el empresario Emili Vives quiere recuperar el pueblo abandonado de Conill, en el término de Tàrrega.

tracking