SEGRE

PATRIMONIO ARQUITECTURA

Últimas obras para reabrir la iglesia de Rosselló en un mes

El obispo presidirá la primera misa el 3 de mayo || Los operarios trabajan ahora en la pintura y la instalación del gas y la luz

Un operario trabajando ayer en la pintura de Sant Pere de Rosselló, que prevé volver a acoger misas a partir del            3 de mayo.

Un operario trabajando ayer en la pintura de Sant Pere de Rosselló, que prevé volver a acoger misas a partir del 3 de mayo.MAGDALENA ALTISENT

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Los operarios que trabajan en la reconstrucción y rehabilitación de la iglesia de Sant Pere de Rosselló ultiman estas semanas los trabajos de pintura y la instalación del gas y la luz para poder reabrir el templo en mayo, casi dos años y medio después de la caída del campanario el 29 de enero de 2016, como ya avanzó SEGRE. El alcalde, Josep Abad, explicó que ya han terminado las obras para arreglar el pavimento del inmueble, que se han podido ejecutar con partidas presupuestarias que sobraron de la rehabilitación de la fachada. En este sentido, el consistorio buscará la financiación para pagar los trabajos para pintar el templo, presupuestados en 27.000 euros, una vez estén terminados. Por su parte, desde el obispado apuntaron que está previsto que el obispo de Lleida, Salvador Giménez, presida la primera misa en la iglesia el 3 de mayo. Asimismo, aseguraron que el coste de las obras para el recubrimiento y la consolidación de la estructura de la iglesia, cuyo presupuesto asciende a 140.000 euros, lo ha asumido el obispado a la espera de recibir las subvenciones previstas de la Generalitat y la Diputación. Ahora quedarán pendientes los trabajos para la reconstrucción del campanario, una actuación que cuenta con un presupuesto aproximado de 240.000 euros. Cabe recordar que la rehabilitación de Sant Pere de Rosselló empezó a principios de septiembre del año pasado y la reapertura estaba prevista para el día de Reyes, aunque después se aplazó hasta finales de marzo.

Un operario trabajando ayer en la pintura de Sant Pere de Rosselló, que prevé volver a acoger misas a partir del            3 de mayo.

Un operario trabajando ayer en la pintura de Sant Pere de Rosselló, que prevé volver a acoger misas a partir del 3 de mayo.MAGDALENA ALTISENT

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