Una productora de televisión rehabilitará el cine de Penelles, cerrado hace catorce años

Una productora de televisión, que el próximo mes de mayo grabará un programa en Penelles aprovechando la popularidad del Gargar Festival, se ha comprometido a rehabilitar el antiguo cine de la población, cerrado desde 2004. La firma llevará a cabo las obras justo después de la séptima edición de la Fira del Món Rural y la tercera del festival de street art, que cada año reúne a miles de visitantes en esta población de la Noguera y que se celebrará el primer fin de semana de mayo. El antiguo cine de Penelles se ubica en un inmueble de la familia Vilaltella en el centro de la población, que lo cederá al consistorio para que la productora pueda llevar a cabo las obras con la condición de que se programen proyecciones de cine de forma periódica. Desde el ayuntamiento de Penelles confirmaron ayer que se ha firmado un convenio con la familia titular del inmueble para hacer la cesión del cine durante 4 años prorrogables a 4 más, y sobre las intenciones de la productora hacia el municipio de Penelles.

La iniciativa responde a una contribución activa, sostenible y voluntaria hacia la localidad de la productora televisiva, que llevará a cabo las obras por un “bien común para el municipio y para que se quede en el pueblo una inversión considerable”, explicaron ayer vecinos de Penelles. Por su parte, el alcalde, Eloi Bergós, apuntó que fue la empresa la que se puso en contacto con el municipio para ofrecer esta iniciativa para recuperar el cine local. Bergós apuntó que el proyecto aportará un equipamiento muy “útil” para Penelles. Precisamente, será en este espacio donde el consistorio espera poder proyectar un documental del Gargar Festival y como espacio donde recibir a los diferentes grupos de artistas que llegan hasta Penelles para participar en este certamen de street art. “Estudiaremos un programa periódico de proyecciones a lo largo del año, ya sea en ciclos o temporadas”, dijo Bergós.

El consistorio prevé un programa periódico de proyecciones a lo largo del año en distintos ciclos

Precisamente, el consistorio ya ha impulsado distintos proyectos turísticos aprovechando el auge del festival y de turistas atraídos por los murales que llegan año tras año a esta población.

Uno de estos es asesorar y ayudar a los propietarios de viviendas cerradas y en buen estado, para que las habiliten, las destinen a uso turístico y suplir así la carencia de este tipo de residencias en la población. Paralelamente, también ofrece la residencia de artistas, un piso municipal, para que los creadores puedan instalarse y ofrecer talleres de arte para niños. Este 2018 el consistorio prevé abrir también al público un albergue municipal con 24 plazas.

Sala rural pionera en Lleida, que abrió por primera vez en el año 1945

El elevado coste de la nueva tecnología ha resultado definitivo para que muchas salas rurales decidieran cerrar y dejar de proyectar películas. Un ejemplo de ello fue Penelles, que decidió bajar para siempre el telón del cine Kursaal en 2004. Hasta ahora el espacio ha permanecido cerrado y solo abre para acoger alguna actividad en fiestas locales. En el momento de su estreno el Kursaal fue uno de los cines pioneros en abrir en zonas rurales. Se inauguró en el año 1945 y una década después tuvo que cerrar, aunque volvió a abrir en 1963 y se mantuvo en funcionamiento hasta el 2004. La mayoría de los cines de zonas rurales se mantuvieron gracias a los abonos de decenas de vecinos que se resistían a que las salas cerraran. El alcalde apuntó que estudiarán un sistema de fidelización para conseguir socios y hacer rentable mantener abierto el equipamiento y darle otros usos sociales más allá de ser una sala de cine.