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REGULACIÓN ZONAS DE OCIO

Camarasa regula los usos y la zona de baño del área recreativa junto al río

Una vigilante para el verano inicia hoy sus servicios y abre el chiringuito del parque

Imagen de archivo del año pasado del vigilante del río.

Imagen de archivo del año pasado del vigilante del río.SEGRE

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Regular los usos y la zona de baño, el acceso de vehículos y la contaminación acústica del parque Maria Rúbies de Camarasa, el área recreativa en la zona del río, conocida como la Platgeta, son los motivos por los que el ayuntamiento ha elaborado una ordenanza municipal para aumentar la seguridad en la zona. Precisamente, se trata de un área que no está habilitada para el baño y que carece de medidas de seguridad, aunque se llena de bañistas todos los veranos, especialmente los fines de semana. Así lo confirmó la alcaldesa, Elisabet Lizaso, quien apuntó que la regulación contempla la delimitación específica de zonas de baño, un área para picnic, la prohibición de aparcar en el camino de acceso, de acampar y las pernoctaciones en autocaravanas, además de la obligación de llevar a los perros atados o recoger las basuras. “Esta semana instalaremos paneles informativos con la normativa de uso de este espacio”, dijo. Para el consistorio, el objetivo es fomentar un turismo más sostenible y la posibilidad de ofrecer más servicios. En este sentido, está previsto que hoy una vigilante inicie sus servicios, que se alargarán todos los fines de semana de julio, desde media mañana hasta la tarde. En agosto estará todos los días de la semana, porque la afluencia de bañistas también se duplica. Lizaso recordó que las funciones del vigilante, con conocimientos de salvamento, se centran en velar por la seguridad de los bañistas, avisar en caso de emergencia y advertir de la peligrosidad de bañarse en el río. La ordenanza contempla sanciones aunque “de momento solo se informará”, dijo Lizaso. En los últimos cuatro años no se ha registro ningún muerto por ahogamiento en este enclave, y ello también se debe a las medidas de seguridad. En la década anterior se registraron nueve fallecidos.

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