La gestión pública de Boí Taüll se limitará a las pistas y Nozar seguirá al frente de hoteles

La gestión directa de Boí Taüll por parte de la Generalitat tras la renuncia del grupo Nozar se limitará a las pistas de esquí, mientras que los establecimientos hoteleros que conformaban hasta ahora el resort del Pla de l’Ermita seguirán en manos privadas. Así lo confirmaron fuentes del departamento de Economía y próximas a la estación. Promocions Turístiques de la Vall, filial de Nozar, seguirá la próxima temporada al frente de cinco alojamientos: los hoteles Romànic y Taüll, el aparthotel Augusta, los apartamentos La Solana y Residencial La Solana. El hotel Boí Taüll Resort ha pasado a manos de una cadena hotelera que lo ha rebautizado como Yoy Vall de Boí.

Ninguno de los edificios del Pla de l’Ermita forma parte de los activos de la estación de Boí Taüll que la Generalitat adquirió en 2014, como dación en pago de deudas del grupo Nozar. En años anteriores, estos inmuebles habían pasado a manos de otros acreedores y actualmente sus dueños son particulares y entidades bancarias. Hasta ahora Promocions Turístiques de la Vall había seguido explotándolos todos como arrendataria, de forma conjunta con las pistas propiedad de la Generalitat. Sin embargo, el grupo Yoy hizo meses atrás una oferta superior por el alquiler del hotel Boí Taüll Resort, el mayor con 89 habitaciones.

Son los actuales propietarios de los establecimientos hoteleros del Pla de l’Ermita

Las pistas de esquí emplean a 63 personas, entre personal fijo discontinuo y de temporada, cuyos contratos se están subrogando ya a Actius de Muntanya, empresa pública de la Generalitat propietaria de Boí Taüll. También se da por segura la continuidad de directivos. Fuentes sindicales apuntaron que la subrogación de contratos no incluye a las 76 personas empleadas en tareas de hostelería, tanto en los establecimientos hoteleros del Pla de l’Ermita como en cafeterías del dominio esquiable.

La renuncia del grupo Nozar a gestionar las pistas a las puertas del inicio de la temporada de esquí, el próximo sábado, ha llevado a un relevo apresurado para asegurar la apertura del dominio esquiable y evitar pérdidas para el territorio. El hecho de que se haya gestado en apenas unas semanas deja todavía cuestiones por resolver. Una de ellas es la gestión de reservas, ahora que una empresa gestiona el alojamiento y otra las pistas. La web del resort ayer no permitía reservar estancias, si bien responsables de Nozar aseguraron el martes que tenían el doble que en 2017 para la Purísima, Navidad y fin de año.

Miles de reservas para la Purísima y Navidad, el doble de las de 2017 Las buenas condiciones de nieve ha animado las reservas en los hoteles de Boí Taüll, según explicó el martes Martí Rafel, directivo de Nozar. De hecho, se ha duplicado el número de cara al puente de la Purísima y también de Navidad y Fin de Año en comparación con la pasada campaña, que ya fue buena. Rafel cuenta con que serán miles las reservas hechas hasta el momento por los esquiadores animados por las nevadas que se han registrado hasta ahora, que ha hecho que estado de las pistas sea óptimo con grosores de entre 30 y 90 centímetros. Los hasta ahora gestores de Boí Taüll emitieron un comunicado en que señalaron que su renuncia pone fin a una etapa “no exenta de incertidumbre y dificultad” e insistieron en que la continuidad de la estación “queda garantizada”. En cuanto a la apertura el sábado, lo harán con un forfait a 20 euros para adultos y gratis para menores de hasta 15 años.