Cien vehículos camuflados controlan desde hoy las carreteras catalanas

El Servei Català de Trànsit y los Mossos d’Esquadra velarán por la seguridad en las carreteras catalanas durante la segunda fase de esta Semana Santa con la incorporación de un centenar de vehículos camuflados. Y es que, según explicó ayer el jefe de la comisaría general de Mobilidat de los Mossos d’Esquadra, Joan Carles Molinero, han decidido incrementar el uso de coches no logotipados después de comprobar que “el efecto sorpresa de estas patrullas ha permitido incrementar en un 67% la detección de infracciones al volante”. Concretamente, se han detectado 17.443 infracciones en los tres primeros meses del año, entre los que destacan casos tan particulares como conductores afeintándose, cepillándose los dientes, amamantando a un bebé o masturbándose al volante. En este sentido, el director de Trànsit, Juli Gendrau, criticó que conductas como las descritas por el comisario retratan a “suicidas y asesinos en la carretera” porque ponen en riesgo su vida y la de otras personas que circulan por la vía. Cada una de las ocho regiones policiales catalanas aportarán entre ocho y doce vehículos camuflados, que graban la acción o incorporan un radar móvil. Asimismo, se desplegarán 1.666 agentes para efectuar alrededor de 1.418 controles. En otro orden de cosas, cuatro personas resultaron heridas en la mañana de ayer en sendos accidentes de tráfico en Bellcaire d’Urgell y Almacelles. En el primer caso, los hechos ocurrieron pocos minutos después de las once en el kilómetro 132,3 de la carretera C-53 cuando colisionaron un camión y un turismo. Como consecuencia del impacto, el camión estalló en llamas y dos personas fueron atendidas in situ por el SEM. En Almacelles, dos hombres de 39 y 52 años fueron trasladadas al hospital Arnau de Vilanova con heridas de diversa consideración tras chocar dos vehículos en el cruce de la N-240 con la A-2. Hasta el lugar se trasladó una ambulancia y un helicóptero del SEM.