¿Qué debemos hacer si nos encontramos de cara con un oso?
A pesar que los encuentros entre osos y humanos en el Pirineo de Lleida sean muy poco probables, en SEGRE te damos algunos consejos para evitarlo y saber qué hacer
Osos en el Pirineo catalán
Durante las últimas semanas, coincidiendo con dos ataques de osos a ganado en el Pirineo de Lleida y con la bajada de Goiat hasta el Pallars Jussà, ha habido un aumento significativo de la alarma social, sobre todo en redes y en comentarios a estas noticias.
Uno de los más recurrentes es el posible caso hipotético de un encuentro entre un oso y personas, que cada vez copan más los caminos de alta montaña por donde transcurren los aproximadamente 40 ejemplares de oso pardo del Pirineo. Sólo hay que hacer una busca en Google para saber que esta es una de las preguntas más demandadas en la red.
Si bien estos encuentros son difíciles ya que, según apunta Piroslife, los plantígrados detectan a los humanos a una gran distancia y los evitan al percibirlos como una amenaza, no son imposibles. Sin ir más lejos, el año pasado un pastor gravó un encuentro de un oso mientras pasturaba su rebaño.
¿Puede atacar un oso?
Si hay pocas posibilidades de un encuentro, los ataques de oso pardo son todavía menos probables. Sólo atacaría si se viera amenazado o sorprendido, como medida defensiva. La mayoría de los casos en que se han registrado ataques han sido encuentros con hembras con crías y osos que se han visto sorprendidos -y asustados- por la presencia humana.
La prevención es clave
Para no encontrarse con situaciones no deseadas y peligrosas, la prevención es muy importante. Hay que tener en cuenta que el primero que evitará un encuentro con humanos será el mismo animal, que no nos ve como presas y nos evita gracias a su olfato y oído privilegiados.
Un primer consejo es hacernos notar durante nuestros trayectos, por ejemplo hablando, de manera que el mismo oso sepa dónde estamos y evitemos el factor sorpresa. Hay que apuntar que la mayoría de encuentros son con personas que iban solas y, por lo tanto, hacían menos ruido que yendo en grupo. Los individuos no acompañados son más vulnerables que los grupos.
Si llevamos perros, es importante llevarlos ligados, evitando así que el oso se pueda sentir amenazado. Además, también se recomienda no salir de los caminos señalizados.
¿Y si nos encontramos un oso?
Si con todas estas recomendaciones nos encontráramos con un oso -probabilidad muy baja-, tenemos que saber que no nos tenemos que poner en medio del camino o trayecto del oso y nunca entre una hembra y sus crías. De la misma manera, y por sentido común, no nos tenemos que acercar. En todo momento se tiene que mantener la calma y no gritar.
