El Arc d’Adar de Llardecans ya ha recuperado su aspecto original, después de que esta semana acabaran las obras que se han llevado a cabo para levantar de nuevo la estructura, derribada por un camión el pasado 31 de marzo. Los trabajos también han permitido situar la cronología de este emblemático arco del Segrià a finales del siglo XV, así como confirmar su pertenencia a una construcción de dos plantas.