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Vecinos de Gàrzola exigen que les llegue agua potable a sus casas

La que tienen actualmente tiene nitratos y solo hay una fuente apta para el consumo en el pueblo || Vilanova prevé la construcción de un nuevo pozo lo antes posible

La plataforma de vecinos de Gàrzola durante una protesta en el cruce de Vilanova de Meià.

La plataforma de vecinos de Gàrzola durante una protesta en el cruce de Vilanova de Meià.SEGRE

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Una asociación de vecinos del núcleo de Gàrzola, en el municipio de Vilanova de Meià, exige al ayuntamiento la construcción de una tubería que conecte la red de agua potable de Vilanova de Meià con un nuevo depósito que abastezca las casas de su pueblo y solucione el actual problema de la contaminación por nitratos que impide su consumo. En 2008 ya se construyó una planta de osmosis en el pueblo para potabilizar el agua y de la cual todos los vecinos tienen una llave. Estos exigen desde hace años que el agua potable les llegue a casa ya que les resulta incómodo tener que cargarla siempre dada la avanzada edad de muchos de ellos. La solución de la tubería propuesta por la asociación de vecinos tendría un coste de unos 60.000 euros y es, según Joan Latorre, uno de los miembos de la asociación, “de fácil realización, tanto por el importe de inversión como de dificultad técnica”, pero el ayuntamiento de Vilanova de Meià considera que “es mejor que cada pueblo tenga su pozo de agua para que lo destine a los servicios o finalidades que desee”. Por este motivo, el consistorio prevé la construcción de un pozo a 500 metros de profundidad para llevar agua al depósito actual de Gàrzola, lo que supondría una inversión de 281.999,23 euros. En diciembre de 2016, la Agència Catalana de l’Aigua (ACA) otorgó una subvención de 174.000 euros para las obras del nuevo pozo. El plazo para hacer las obras y poder recibir la ayuda del ACA terminaba en 2018, por lo que el ayuntamiento tuvo que pedir una prórroga para realizar las actuaciones. A día de hoy el proyecto sigue paralizado ya que, según explicó el alcalde de Vilanova de Meià, Xavier Terré, “estamos pendientes de una modificación del POUM”. Al mismo tiempo, el plazo para finalizar las obras del nuevo pozo sin perder la subvención del ACA finaliza a principios del 2020, por lo que el ayuntamiento está pendiente de reunirse con el ACA para solicitar una nueva prórroga.

Recientemente el ACA ha convocado una nueva línea de ayudas para la mejora de los abastecimientos municipales con una dotación de 15 millones de euros.

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