La memoria que emerge de Rialb

Los pueblos del Alt Urgell y la Noguera que comparten el pantano de Rialb conmemoraron ayer el vigésimo aniversario de la inauguración de la presa que cambió para siempre el aspecto de las dos comarcas. El Consorci Segre Rialb inauguró en Mirambell (Bassella) la exposición Segre endins, l’abans i el després de la presa de Rialb.

Esta muestra recuerda la construcción de uno de los últimos grandes pantanos promovidos por el Estado, el segundo mayor de Catalunya y uno de los más polémicos por las movilizaciones en pueblos como Castellnou de Bassella, Miralpeix, Aguilar de Bassella, la Clua d’Aguilar y Tiurana, que tuvieron que ser desalojados.

Aunque los primeros proyectos para el embalse se remontan a los años 70, su construcción no se inició hasta 1992. Así lo relata la periodista de SEGRE Maria Molina en un audiovisual que forma parte de la exposición, y recoge el testimonio de una docena de personas. Recuerda el anuncio y la colocación de la primera piedra del pantano en 1992, por el entonces ministro de Obras Públicas, Josep Borrell. Vecinos y familias que se vieron obligados a abandonar sus casas visitaron la exposición, comisariada por Núria Solé, del consorcio Segre Rialb. La muestra consta de 16 paneles que recuerdan el impacto de esta gran infraestructura. La exposición visitará todos los municipios que forman parte del consorcio y estará abierta a partir de hoy en Tiurana. Han participado el consell del Alt Urgell, los archivos comarcales del Alt Urgell y de la Noguera y la dirección general de Cultura Popular de la Generalitat.