Gerb recoge la basura puerta a puerta a los mayores de 70 años

Gerb se ha convertido en el primer pueblo de la Noguera que aplica la recogida de basura puerta a puerta, aunque solo a una parte de los vecinos: los mayores de setenta años y los que vivan solos y acrediten alguna discapacidad que reduzca su movilidad. Así lo han establecido la entidad municipal descentralizada (EMD) de Gerb y el ayuntamiento de Os de Balaguer, tras haber suprimido una de las cinco islas de contenedores de esta localidad. De este modo, evitan que las personas con mayores dificultades para desplazarse tengan que recorrer largas distancias para tirar su basura.

La alcaldesa de Os de Balaguer, Estefanía Rufach, explicó que la isla de contenedores retirada estaba cerca de la carretera de Vilanova de la Sal, en una parcela privada cuyo propietario tiene intención de instalar una valla. Tras valorar una nueva ubicación en la misma zona no se encontró un espacio adecuado por falta de espacio, tanto de la isla como por las dimensiones de los camiones y “decidimos retirarla”.

La brigada municipal llevará a cabo esta recogida de basura puerta a puerta tres días de la semana o en función de la demanda. Los interesados que cumplan los requisitos deben inscribirse en el ayuntamiento para recibir este servicio. Rufach explicó que en esta zona, próxima a la carretera de Vilanova de Sal, no hay muchos vecinos, pero la medida se ha extendido a toda la población.

Pese a ello, vecinos de Gerb que viven cerca de la carretera criticaron ayer que no se instalara otra isla de contenedores en la zona. “Precisamente, los contenedores estaban siempre colapsados. No solo vive gente mayor aquí y también nos quedan lejos el resto de islas del pueblo”, dijeron. Ayer desconocían que el consistorio hubiese aplicado la recogida puerta a puerta para los mayores.

Fomento de Construcciones y Contratas inició en 2018 el despliegue del nuevo servicio de recogida de basura de la Noguera en islas de contenedores. El servicio se adjudicó por 1,7 millones por cuatro años, prorrogables a cuatro más. Asimismo, media docena de pueblos de la comarca mantienen el antiguo sistema por sus características orográficas y por el volumen de habitantes, que no hace viable el nuevo sistema. Cada consistorio paga en función del número de islas. Según fuentes del consell, fue el consistorio el que decidió retirar la isla de contenedores y no reubicarla.