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Alcarràs multa a 91 vecinos por tirar basura en calles y fincas al 'delatarles' datos personales

Personas que no siguieron las normas de la recogida puerta a puerta reciben sanciones de entre 150 y 400 euros || Las bolsas contenían sobres, recibos y otros documentos que encontró la policía municipal

Vecinos de Gerb han dejado la basura en la calle como protesta por la retirada de los contenedores.

Vecinos de Gerb han dejado la basura en la calle como protesta por la retirada de los contenedores.SEGRE

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El ayuntamiento de Alcarràs multó a lo largo del pasado año a 91 vecinos por arrojar bolsas de basura en campos y calles en lugar de aplicar la recogida puerta a puerta, el sistema que la población adoptó en diciembre de 2018. Según el alcalde, Manel Ezquerra (Sempre Alcarrràs), la policía local pudo localizar a los infractores examinando los desechos, donde encontraron remites de cartas, domiciliación de recibos o pegatinas de paquetes, entre otros documentos con datos personales. “De hecho, la mayoría de las sanciones ya se han cobrado porque no ha habido margen de alegación”, indicó. Oscilan entre los 150 y los 400 euros, según establece la ordenanza de civismo en el capítulo de infracciones leves que rondan entre los 30 y los 600 euros. Las más cuantiosas corresponden a las que afectan al medio ambiente, es decir, las basuras que se han arrojado en campos de cultivo o zonas verdes y también ha castigado que se dejaran en papeleras en el centro urbano.

Agentes de la Policía Municipal de esta población del Segrià, integrada por 15 personas, patrullan de paisano por la población desde hace tres meses. El objetivo es coger “in situ” a las personas que cometen actos incívicos como ensuciar las calles y, en especial, dejar los excrementos de sus perros en la vía pública. “No se hace cada día pero si esporádicamente y de forma aleatoria para que el método sea efectivo”, explicó Ezquerra. El alcalde indicó que en lo que va de año ya se han impuesto algunas multas más por arrojar la basura en lugares inadecuados. No obstante, el sistema ha surtido efecto y son muchas menos que en 2019. “También es cierto que ahora ya no encontramos identificaciones en las pocas bolsas de basura que se han depositado incorrectamente”, añadió.

Aitona y Torres también llevan meses “a la caza” de foráneos que arrojan la basura en sus contenedores y les hacen pagar 100 euros tras identificarlos.

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