Guissona urbaniza un tramo de calle que se abrió hace cinco años

Guissona prevé aprobar en el pleno del 27 de abril un proyecto de urbanización y reparcelación para dar continuidad a la calle Oliveres. Se trata de un tramo de vía de unos 200 metros que se abrió en 2015 para conseguir un mejor acceso al centro educativo FEDAC y mejorar la comunicación con el centro histórico. El consistorio ha desencallado ahora la actuación urbanística para que se puedan construir once nuevas viviendas. Según el edil de Urbanismo, Ramon Sala, es un proyecto complejo ya que solo se pueden levantar viviendas en un lado de la calle, ya que en el otro está el centro educativo, lo que “supone unos costes de urbanización altos”. Sala apuntó que en la situación actual de expansión el proyecto permitirá poner más viviendas en el mercado, ya que la población gana unos 500 habitantes al año. En este sentido, Guissona también tiene pendiente doblar las instalaciones de su depuradora y BonÀrea también ha comenzado la construcción de una nueva para sus propias instalaciones.