Lleida reivindica una desescalada rural

Las comarcas de Lleida vivirán a partir de mañana un desconfinamiento a dos velocidades. Mientras la región sanitaria del Pirineo pasará a la fase 1 de la desescalada, la de Lleida y la Catalunya Central (a la que pertenece el Solsonès y Torà y Biosca) seguirán en la fase 0. Esta situación ha provocado que los pueblos pequeños insistan en un desconfinamiento diferente al de las grandes ciudades por el menor riesgo de contagio y exigen tener en cuenta la realidad del mundo rural para plantear la desescalada del estado de alarma por el coronavirus.

El presidente de la Associació de Micropobles y alcalde de Torrebesses, Mario Urrea, aseguró que “no podemos hacer un desconfinamiento igual para los que son desiguales”, por lo que instó a una desescalada “acorde con la realidad de los municipios y de su área de influencia hospitalaria”. Por ello, insistió en plantear excepciones dentro de las regiones sanitarias, tal como ya anunció la consellera de Salud, Alba Vergés. Cabe recordar que alcaldes de Lleida ya criticaron que solo la región sanitaria del Pirineo y Aran pasara a la fase 1 y pidieron que se respetaran las especificidades de las zonas rurales, donde la pandemia ha tenido una menor incidencia (ver SEGRE del viernes).

Alcaldes aseguran que “nos hacen actuar como las ciudades grandes y todo esto no va con nosotros”

En este sentido, el alcalde de Granyena de Les Garrigues, Francesc Esquerda, explicó que la Generalitat tendría que haber pedido que se dividiera el territorio por áreas básicas de salud en lugar de las regiones sanitarias. Del mismo modo, Gisela Sellés, primera edil de Cava, el municipio más pequeño de Lleida, aseguró “nos hacen actuar de la misma forma que ciudades con más población y todo esto no va con nosotros”. Mientras, el presidente de la diputación de Huesca, Miguel Gracia, pidió esta semana que se tenga en cuenta al mundo rural en las decisiones que se tomen para la reconstrucción del país tras la crisis del coronavirus.