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Promesa de un plan de choque con recursos

El territorio pide ayudas, el sector frutícola, que no se le culpe del rebrote y los sindicatos, más coordinación

Imagen de la reunión anoche en El Palau para preparar la campaña de la fruta en plena pandemia.

Imagen de la reunión anoche en El Palau para preparar la campaña de la fruta en plena pandemia.EDGAR ALDANA

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El vicepresident del Govern, Pere Aragonés, prometió ayer un plan de choque con los recursos “necesarios” para paliar el impacto económico del confinamiento perimetral del Segrià en forma de ayudas directas e inversiones estructurales en los presupuestos. “La cifra será la que sea necesario para levantar el territorio”, dijo tras reunirse con el alcalde de Lleida, Miquel Pueyo; el presidente de la Diputación de Lleida, Joan Talarn, y agentes económicos y sociales del territorio. Además, Aragonès reclamó al Estado que las empresas con un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) de zonas con brotes de Covid-19 no tengan que pagar las cotizaciones a la Seguridad Social.

Aragonès dijo que estas medidas seguirán el espíritu de las acciones extraordinarias que se llevaron a cabo después del confinamiento de la Conca d’Òdena, al inicio del estado de alarma, aunque de momento allí nadie ha cobrado las ayudas prometidas, que comienzan a gestionarse. Los sectores que serán prioritarios para recibir estas ayudas serán la agricultura, el turismo y el comercio, indicó el vicepresident.

El vicepresident reclama a Madrid que reduzca los costes para las empresas obligadas a hacer ERTEs

Miquel Pueyo reclamó además medidas para mejorar la “crisis de imagen” de Lleida y la comarca del Segrià, al tiempo que defendió que es necesario “una mejor planificación desde el punto de vista estructural” de la campaña de la fruta. Joan Talarn trasladó a Aragonès la reivindicación de los municipios de recibir ayudas directas para gestionar la crisis sanitaria y que se incremente la dotación de Mossos en la zona o, en su defecto, se encuentre una fórmula para que haya más personal trabajando sobre el terreno en ayuda de los ayuntamientos, bien sea como agentes cívicos o incluso voluntarios.

Desde Unió de Pagesos, su líder, Joan Caball, defendió la necesidad de campañas de promoción no solo de la fruta, sino de otros sectores afectados por los incrementos de costes y la caída de la actividad por la Covid-19, como el turismo. Se mostró preocupado porque se mezcle en la polémica del rebrotea temporeros y personas en situación irregular, remarcando que son dos aspectos diferentes, uno laboral y otro social. Se mostró a favor de test generalizados en las poblaciones con elevados índices de contagio. El presidente de Afrucat, Francesc Torres, reiteró que en las centrales frutícolas no existen tasas elevadas y que de un muestreo de 3.500 análisis han detectado 110 casos. En El Palau, ayer se celebró una nueva reunión de agricultores para planificar la campaña frutícola en la zona.

El líder de UGT en Lleida, José Luis Aguilà, se mostró muy crítico con la gestión de la campaña de la fruta y lo que considera falta de voluntad de solucionar los problemas derivados. La líder de CCOO, Cristina Rodríguez, pidió coordinación de las administraciones, en especial entre Inspección de Trabajo y Salud, y dotar de medios al Sepe, el antiguo Inem.

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