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Unha, tercer pueblo de Aran con calefacción en sus calles

Junto con Salardú y Gessa, para evitar nieve y hielo en invierno

Imagen de archivo de la calle Santa Eulàlia de Unha.

Imagen de archivo de la calle Santa Eulàlia de Unha.JORDI GUARDIOLA

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El pueblo de Unha se convertirá en el tercero de la Val d’Aran que instala calefacción bajo sus calles para evitar la acumulación de nieve y la formación de placas de hielo en invierno. La entidad municipal descentralizadda (EMD) que gobierna esta localidad ha puesto en marcha este proyecto con el apoyo del ayuntamiento de Naut Aran. Está previsto instalarla el año que viene y se sumará a las que funcionan ya en los núcleos de Salardú y de Gessa para mejorar la seguridad tanto de peatones como de vehículos.

La calefacción de Unha se instalará en la calle Santa Eulàlia, que da acceso a la iglesia, la sala social y al Musèu dera Nhèu. Se trata de un tramo con un desnivel de más de diez metros y una pendiente muy pronunciada, cuya inclinación supera el 20%. Por ella circulan tanto peatones como vehículos, según el consistorio.

La EMD y el consistorio tramitan ya el proyecto para poder ejecutar las obras el próximo año

Los trabajos, con un presupuesto de más de cien mil euros, deberán salir a licitación este año para ejecutarlos en 2021, ya que en invierno el frío y la nieve impiden ejecutar obras en el valle. El proyecto prevé desmontar las losas de la calle para instalar las conducciones por las que pasará agua caliente y líquido anticongelante. La caldera se situará en la sala social y el museo deberá acoger el depósito de gasóleo. El alcalde de Naut Aran, César Ruiz-Canela, explicó que el consistorio presta apoyo económico a esta iniciativa de la EMD de Unha.

Una iniciativa pionera en su día para mejorar la seguridad Naut Aran fue pionero en instalar, hace casi dos décadas, la primera calefacción subterránea en el acceso en pendiente a salardú desde la carretera C-28. Se trataba de una solución para evitar que los vehículos resbalasen sobre placas de hielo en invierno, que ninguna otra localidad de Catalunya ni España había adoptado hasta la fecha. Hoy en día sigue siendo una rareza entre los municipios de montaña. Esta misma tecnología se aplicó años después en otras calles de Salardú y, hace unos dos años, en el pueblo de Gessa. El alcalde destacó que suponen una gran mejora en la seguridad.

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