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El sector turístico de la provincia de Lleida prevé cerrar el mejor agosto de los últimos diez años

A excepción de la capital

Turistas navegando en las aguas del pantano de Canelles, que este año está lleno por las abundantes lluvias.

Turistas navegando en las aguas del pantano de Canelles, que este año está lleno por las abundantes lluvias.MAITE MONNE

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El sector turístico de la provincia de Lleida, exceptuando la ciudad, espera cerrar este mes como el mejor mes de agosto de los últimos diez años, según las previsiones del Patronato de Turismo de la Diputación de Lleida. A la espera de las cifras definitivas, que se conocerán a mediados de septiembre, el jefe de promoción y marketing del patronato, Juli Alegre, ha asegurado que "algunas empresas de las zonas de montaña explican que no habían visto nunca las cifras de ocupación de este año".

Según el patronato, los bungalós han funcionado especialmente bien, manteniendo una altísima ocupación durante todo el mes y los establecimientos rurales han tenido un balance muy bueno en el llano (con ocupaciones de casi un 80%) y excelente en el Pirineo, donde se ha llegado casi al 100%.

Por lo que respecta a los hoteles, la ocupación ha ido de entre el 90 y el 100% en las comarcas del Pirineo, pero bastante inferior en las comarcas del llano.

La situación de incertidumbre provocada por el Covid-19, que ha restringido notablemente los desplazamientos largos y en especial los viajes al extranjero, ha causado un incremento de visitantes de proximidad, la mayoría de Catalunya.

Juli Alegre ha afirmado que "el carácter rural de la demarcación de Lleida, con predominio de espacios abiertos, y la excelencia de sus paisajes ha atraído a un gran número de visitantes que buscan un marco saludable y natural para sus vacaciones".

"Es agradable tener estos resultados después de haber perdido los días de Semana Santa porque nos permite ganar musculatura tras una situación dramática", ha remarcado.

DATOS "AGRIDULCES"

Alegre ha agregado: "Estos datos son agridulces porque Lleida reflota, pero vemos que otros destinos turísticos no lo han hecho, vemos que la ocupación en la Costa Daurada (Tarragona) o la Costa Brava (Girona) es muy baja". Sobre los datos de julio, el Patronato de Turismo apunta que las cifras del Instituto Nacional de Estadística señalan que las pernoctaciones en establecimientos de hostelería han registrado un descenso de 10 puntos respecto al mismo mes de 2019, que había sido bueno.

El grado de ocupación de los establecimientos de hostelería del mes de julio este año ha sido del 34,39%, frente al 44,92% del pasado año.

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