ESNOTICIA
La Generalitat interviene residencias de mayores con brotes en Verdú y Bellver
La Generalitat ha intervenido dos residencias para la tercera edad con brotes de Covid en Verdú y Bellver de Cerdanya. La primera, en manos de religiosas, a raíz de una petición de ayuda del centro. La segunda, de una fundación público-privada, al considerar el Govern que no estaba en condiciones de cumplir la normativa para evitar contagios.
La residencia Mare Marcel·lina de Verdú, intervenida por la Generalitat.
El departamento de Salud y el de Asuntos Sociales de la Generalitat acordaron ayer intervenir de forma temporal dos residencias para la tercera edad en las comarcas de Lleida. Se trata de la Mare Marcel·lina de Verdú, regentada por las Hermanitas de los Pobres de Sant Pere Claver; y la Miniresidència Geriàtrica de Bellver de Cerdanya, en manos de una fundación público-privada en la que participa el ayuntamiento. Los dos centros tienen brotes activos de Covid-19 que suman por ahora 34 residentes y ocho trabajadores contagiados.
La Generalitat ha puesto la gestión de la residencia de Verdú en manos de la Associació per al Benestar i el Desenvolupament, una entidad que participa en la gestión de centros y servicios de la administración catalana. El centro para la tercera edad tiene 23 de sus 48 residentes y tres trabajadores contagiados, mientras que fuentes próximas apuntaron a una fallecida el pasado viernes. Por su parte, fuentes municipales explicaron que el propio centro había pedido ayuda al Govern.
Las residencias “verdes” y “naranjas” deberán abrir a visitas y las “rojas”, hacerlas de forma telemática
En cuanto al geriátrico de Bell-ver, la gestión pasará a manos de la Fundació Hospital de Puigcerdà, que asumirá la dirección y “aportará las dotaciones de personal que sean necesarias”. Así lo afirmó la Generalitat, que consideró que este centro estaba en una “situación excepcional de imposibilidad” para cumplir la normativa para evitar contagios. Anunció un plan de actuación que “garantice la viabilidad técnica en aspectos sanitarios, sociales, organizativos y de gestión de calidad” de la residencia, con 11 de los 29 residentes y cinco empleados contagiados. Por su parte, el alcalde de Bellver, Francesc Xavier Porta, dijo que casi todos son asíntomáticos salvo un residente hospitalizado, y se mostró en desacuerdo con la actuación del Govern.
Fuentes de la conselleria de Salud apuntaron que la primera intervención de un geriátrico en Lleida tuvo lugar el pasado verano. Fue la residencia privada de Alcarràs, que registró un brote con varios fallecidos. La gestión volvió a manos de la empresa en unas semanas, según fuentes municipales.
