Mueren un niño y un motorista en accidentes en Sanaüja y Anglesola

Dos personas, una de ellas un niño de nueve años, fallecieron ayer en sendos accidentes de tráfico en las carreteras leridanas. El primer siniestro se produjo pocos minutos antes de las diez de la mañana en el kilómetro 118 de la carretera C-53 a su paso por Anglesola, donde perdió la vida un motorista en un choque con un tractor.

La víctima mortal es J.A.V.S., vecino de Agramunt y de 54 años. Según fuentes policiales, el conductor de la motocicleta habría intentado realizar un adelantamiento al mismo tiempo que el tractor hacía una maniobra para acceder a un camino a su la izquierda.

Como consecuencia, ambos vehículos colisionaron y la víctima resultó gravemente herida. Hasta el lugar se desplazaron cuatro patrullas de los Mossos d’Esquadra y dos ambulancias del Sistema d’Emergències Mèdiques (SEM). Los profesionales sanitarios intentaron reanimar sin éxito al motorista, que falleció al cabo de pocos minutos en el lugar del accidente. Por su parte, el conductor del tractor resultó ileso.

Horas después, a las 19.14 horas, un niño de nueve años falleció en un choque frontal entre un turismo y un todoterreno en la carretera C-1412a a su paso por el término municipal de Sanaüja. Por causas que los Mossos d’Esquadra investigan, los dos vehículos colisionaron y, como consecuencia del impacto, resultaron heridos otros tres ocupantes del mismo vehículo: uno en estado grave y dos, entre ellas otro menor, con pronóstico menos grave.

Todos fueron trasladados por el SEM al hospital Arnau de Vilanova. Hasta el lugar también se trasladaron cuatro patrullas de los Mossos d’Esquadra, que cortaron la circulación para facilitar la labor de los servicios de emergencia.

Con las de ayer, ya son cuatro las víctimas mortales en accidentes de tráfico en las carreteras leridanas en lo que va de año, una menos de las que se produjeron en el mismo periodo del 2020. La última fue un adolescente de 15 años que sufrió una salida de vía de un quad el pasado 7 de marzo y falleció tras cinco días ingresado en el hospital Arnau de Vilanova en estado crítico.

Asimismo, un vecino de Aitona de 58 años perdió la vida el 12 de enero después de que el turismo que conducía cayera en el interior de la acequia Major de esta localidad. El conseller de Interior en funciones, Miquel Sàmper, apeló ayer la “buena conducción” y a extremar la precaución al volante para evitar los accidentes de tráfico mortales con víctimas vulnerables.

Destacó que de los diecisiete fallecidos en las carreteras catalanas en lo que va de año, 14 son de sectores considerados “frágiles” en la movilidad: nueve motociclistas, tres peatones y dos ciclistas.