Un año de prisión por pintar grafitis en un tren en la estación de Cervera

La Audiencia de Lleida ha condenado a un año de prisión por un delito de daños a un acusado de pintar varios grafitis en dos vagones de un tren que estaba estacionado en la estación de Renfe de Cervera. El tribunal rechaza el recurso presentado por la defensa y confirma la pena impuesta en primera instancia por el Juzgado de lo Penal 2 de Lleida, que también impuso al condenado una multa de 1.080 euros y el pago de una indemnización de casi 5.000 euros.

La Audiencia considera que hay pruebas suficientes para confirmar la autoría del delito y dice que la pena impuesta es proporcional a los daños causados. Según la sentencia, la prueba de cargo que sustenta la condena está constituida por la declaración de los agentes de la Policía Local y Mossos d’Esquadra, quienes el 11 de agosto de 2017, de madrugada, estaban haciendo labores de vigilancia en la estación de Cervera y vieron a varias personas que estaban haciendo pintadas en un tren.

Los agentes comprobaron que había cinco personas, de las que cuatro se fueron corriendo del lugar y solo pudieron interceptar a una, el acusado. Este individuo, según las declaraciones policiales, tenía manchas de pintura en las manos y la ropa, y estaba “cansado y nervioso”.

Al identificarle, el acusado negó que estuviera haciendo pintadas y dijo que corrió al ver a los agentes porque llevaba hachís encima. Para la Audiencia, la prueba sobre la autoría “resulta contundente” pues los agentes pudieron ver a varias personas pintando un tren y después pudieron detener al acusado, que tenía manchas de pintura.

Rechaza la alegación de la defensa de que el acusado trabajaba pintando escenarios y constata que la acción que cometió se tipifica en un delito de daños y no un mero deterioro estético porque supuso un deterioro considerable en los vagones del tren. .

En este sentido, considera proporcionada la indemnización fijada que debe pagar a Renfe por los daños, de un total de 4.972 euros por los trabajos que supuso pintar de nuevo todo el tren. La defensa solicitaba la absolución o una responsabilidad civil de 2.000 euros, a lo que se opuso la Fiscalía. La sentencia de la Audiencia aún no es firme y puede ser recurrida.