La actuación de saneamiento aumenta la seguridad de los taludes sobre la carretera de Camarasa a Sant Llorenç

La Diputació de Lleida ha entregado a la Oficina Técnica de Acción y Evaluación Ambiental (OTAA) de la Generalitat un informe que señala que se ha mejorado más de un 100% la seguridad de los taludes sobre la carretera LV-9047, entre Camarasa y Sant Llorenç de Montgai, en la Noguera. La diputación leridana actuó sobre un 20% de la superficie del talud en la zona de la Roca dels Bous y retiró, con medios mecánicos y sin usar explosivos, 46 bloques de rocas detectadas como potencialmente inestables y con riesgo de caer a la carretera. El Servicio de Vías y Obras de la institución propone diferentes acciones de corrección sobre el entorno natural, que contemplan la construcción de un rompeolas y la integración de los taludes con vegetación autóctona.

El informe, que incluye los análisis de riesgos geológicos y la memoria ambiental con que se procedió a los trabajos, concluye que "de acuerdo con los cálculos geotécnicos, el factor de seguridad ha aumentado de 1 a una media de 2,05, con una mejora de más de un 100%". Desde el punto de vista de la seguridad de la carretera que transita al pie de estos taludes, se efectuó un análisis con drones de la vertiente de la Roca dels Bous, cuantificado en 30.400 m2. "De estos, 7.200 m2 se habían considerado de potencial inestable. Una vez revisados al detalle los 7.200 m2, se han retirado 46 bloques con un volumen total mesurado (con limitaciones) de 520 m3", señala el informe.

Según la memoria técnica, se van identificado 17 zonas con bloques|blocs potencialmente inestables, mediante fotogrametría en dron. Esta técnica se ha aplicado al talud de la Roca dels Bous en su conjunto y en el Talús del Pont Vell o de la Escaleta.

Algunas de las zonas se inspeccionaron también físicamente coincidiendo con los días de los vuelos en dron, accediendo por algunas de las múltiples vías de escalada existentes. Durante la inspección física, se ratificaron buena parte de los datos obtenidos con el dron, si bien algunas se descartaron, y se manifiesta la precariedad de algunos puntos, donde incluso la simple práctica deportiva de la escalada podría movilizar bloques de piedra sobre la plataforma de la carretera, explican desde la Diputació de Lleida.

Piedras retiradas con 'airbags'

Con el fin de retirar los bloques, se hizo mayoritariamente con el uso de 'airbags' cuando se realizan trabajos en altura. La técnica proviene de la minería a cielo abierto y del rescate de personas y los Bombers también lo utiliza para excarcelar y vuelcos de vehículos. Se trata de una técnica que permite trabajar a unos metros de distancia del bloque|bloc que se quiere retirar y, por lo tanto, fuera del alcance de cualquier movimiento descontrolado que pudiera atrapar a los operarios involucrados, sus cuerdas o su trayectoria de escapatoria. Es también la técnica ergonómica más recomendada por los especialistas en seguridad laboral, ya que evita las maniobras forzadas de los operarios involucrados. Además, no es invasiva con el entorno.

El saneamiento de los taludes fue a cargo de la empresa Kuroba-Quatre, SL, contratada por la Diputació, y se ha dividido en dos fases. La primera es la que se ha realizado de forma preventiva a partir de un informe preventivo redactado por el doctor ingeniero Carles Raïmat y se ha centrado en la retirada de bloques inestables de piedra detectados por imágenes tomadas con drones. La segunda, consiste en un análisis técnico y económico de las posibles alternativas que se llevarían a cabo en un futuro a partir de las conclusiones finales una vez se han retirado los bloques con carácter preventivo.

El informe de Raïmat del mes de marzo recomendaba empezar la retirada de bloques potencialmente inestables previos a la redacción del proyecto definitivo. A continuación, la Diputació de Lleida convocó una reunión con el OTAA con el fin de planificar la actuación. Dado el interés ambiental y del espacio natural donde se tenía que llevar a cabo, el OTAA recomendó realizar las tareas a finales de verano para evitar hacer los trabajos en época de nidificación de pájaros. Para hacer el seguimiento ambiental, la diputación leridana contrató a una ambientóloga especialista, Pilar Mallol, la cual ha emitido un informe ambiental.

La Diputació comunicó previamente estas actuaciones al ayuntamiento de Camarasa y al de les Avellanes y a sus núcleos agregados de Sant Llorenç de Montgai y Vilanova de la Sal. El consistorio de Camarasa reclamó por escrito si estos trabajos se podían realizar antes del inicio del curso escolar con el fin de no afectar al transporte escolar que discurre por esta vía. Una vez estudiada la propuesta, se atendió su petición, y se programaron para acabarse antes del día 10 de septiembre.