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Govern y La Vall de Boí pujan por suelo de Boí Taüll pero otro postor les supera

Fincas que conservó la anterior propietaria de la estación y que ahora se subastan

Imagen de archivo de la urbanización del Pla de l’Ermita.

Imagen de archivo de la urbanización del Pla de l’Ermita.

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La Generalitat y el ayuntamiento de La Vall de Boí se han unido para tratar de adquirir fincas propiedad de la antigua titular de Boí Taüll junto al Pla de l'Ermita, que ahora salen a subasta en el marco de la liquidación de la firma. Sin embargo, otro postor ha superado la oferta de las dos administraciones a falta de dos semanas para cerrar la puja.

El ayuntamiento de La Vall de Boí y la Generalitat se han unido para adquirir suelo que la antigua propietaria de Boí Taüll, filial del grupo Nozar, conserva entre la urbanización del Pla de l’Ermita y las pistas de esquí. Son 247 hectáreas de suelo rústico divididas en 368 fincas que no pasaron a manos del Govern en 2014, cuando aceptó el dominio esquiable como dación en pago de deudas.

Ahora la firma de la familia Nozaleda está en liquidación, las parcelas en subasta y las dos administraciones tienen interés en ellas. Sin embargo, les ha salido una inesperada competencia: otro postor ha superado ya la oferta de los dos entes públicos, a falta de dos semanas para que concluya la puja. El consistorio quiere garantizar que los rebaños de los ganaderos locales puedan seguir pastando gratis en estos terrenos, tal como han hecho durante años.

Por su parte, la Generalitat quiere asegurarse el suministro eléctrico de la estación, cuya única línea atraviesa estas fincas. Por este motivo, ambas administraciones acordaron que el consistorio contrataría un crédito de 215.000 euros para pujar por las parcelas, mientras que la empresa pública Actius de Muntanya, actual titular de Boí Taüll, aportaría 100.000 más.El convenio prevé que el ayuntamiento adquiera las fincas y otorgue a Actius de Muntanya derechos de uso “para el correcto desarrollo de la estación de esquí”. La subasta comenzó días después en formato telemático en la web del Colegio de Procuradores.

Antes de que el ayuntamiento formalizase su oferta, otro postor ofreció por los terrenos 316.000 euros, mil más que la cantidad que acordaron el consistorio y el Govern.La subasta sigue en curso y la identidad de este postor no se ha hecho pública hasta ahora, pero el ayuntamiento da por hecho que se trata de alguien que conocía de antemano su acuerdo con el Govern. Los términos del convenio entre ambas partes se hicieron públicos en un pleno celebrado el 4 de noviembre. Fuentes municipales apuntaron que podría tratarse de un empresario que ya se interesó en otras subastas de activos de la filial de Nozar en La Vall de Boí, un extremo que este diario no pudo corroborar.

La alcaldesa, Sònia Bruguera, declinó hacer declaraciones sobre la subasta de estas fincas, y se limitó a afirmar que “sería mejor que los terrenos fueran de titularidad pública”. En cuanto al Govern, su aportación de 100.000 euros formaba parte de un acuerdo con el liquidador de la empresa. Se comprometió a ofrecer esta cantidad por los terrenos en el marco de un acuerdo anterior para evitar que telesillas, cañones de nieve y otras instalaciones necesarias para el funcionamiento de la estación de Boí Taüll salieran también a subasta a lo largo de este año (ver claves).

Tercer intento de adjudicar estos terrenos, objeto de reclamaciones

La subasta que actualmente está en curso supone el tercer intento de adjudicar estas fincas, en el marco del proceso de liquidación de la filial del grupo Nozar. Una primera puja quedó desierta en el año 2019 al no haber ninguna oferta, mientras que este mismo año se llevó a cabo una segunda puja que quedó suspendida cuando faltaban pocos días para concluirla. En este caso, la Generalitat objetó que la lista de parcelas incluía algunas que no eran propiedad de la empresa en liquidación, algo que llevó al administrador concursal a paralizar la subasta.

La que se ha convocado ahora no incluye los terrenos que motivaron la impugnación del Govern.

Pastos para los ganaderos locales y asegurar la luz a las pistas de esquí

La subasta de los terrenos donde rebaños han pastado de forma gratuita durante décadas preocupa tanto a los ganaderos como al ayuntamiento de La Vall de Boí. Temen que este aprovechamiento sin coste para los propietarios de ganado termine si el suelo cambia de manos.

El consistorio ha reivindicado ante el juzgado de lo mercantil la existencia de un derecho histórico de uso de estas fincas, mientras que la Generalitat, a través de la empresa pública Actius de Muntanya, exige que se le reconozca el derecho de paso por los terrenos de la línea eléctrica que suministra a Boí Taüll. Ninguna de estas dos peticiones ha sido atendida por el tribunal hasta la fecha.

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