Un hostal con establos para acoger a turistas a caballo en la Segarra

El Hostal Jaumet de Torà ha habilitado establos para recibir a turistas a caballo, y esta misma semana ha recibido a los primeros jinetes procedentes de Barcelona. Para este establecimiento histórico supone un regreso a sus orígenes a principios del siglo XX, aunque lo hace para albergar a un nuevo perfil de turista activo. Jaume Marimon, responsable del hostal, explicó que esta semana han recibido a nueve visitantes a caballo y sus monturas.

Llegaron el pasado miércoles y su estancia se prolongará hasta hoy. Marimon señaló que es una nueva forma de hacer turismo, que permite recorrer a lomos de un caballo los antiguos caminos de la Vall del Llobregós y conocer los encantos paisajísticos y monumentales de la zona, como la torre medieval de Vallferosa, el monasterio benedictino de Cellers, el castillo de L’Aguda, Claret y Sant Serni, entre otros.Los caballos han regresado así al hostal Jaumet, que abrió el siglo pasado como lugar de descanso en el camino entre las comarcas del llano y la montaña, al pie de la carretera entre Barcelona y Andorra. Entonces era frecuente ver carruajes con viajeros que iban a tomar el tren de Calaf; y a otros desplazándose entre el Pirineo y la capital catalana.

Hace casi un siglo, en 1922, construyeron las cuadras con cien estacas para poder dar cobijo tanto a los jinetes como a sus monturas. Entonces ofrecían sus servicios a arrieros, tratantes de ganado y carreteros; ahora los establos son para turistas.