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El segundo contrato entre FGC y la Generalitat incluye inversiones por 1.000 millones de euros, entre ellas para Rodalies Lleida

Pasajeros del tren de la línea de Manresa en Tàrrega.

Pasajeros del tren de la línea de Manresa en Tàrrega.SEGRE

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FGC y la Generalitat han firmado este lunes por la tarde el nuevo contrato programa para el periodo 2022-2026, que incluye, entre otras actuaciones, la gestión de Rodalies Lleida, la R-aeropport, y el impulso de la conexión de las líneas de Vallès i Llobregat-Anoia (L8). El contrato prevé una inversión de la Generalitat de unos 1.000 millones de euros en los próximos cinco años. Aunque para este periodo no consta un eventual traspaso de Rodalies, la compañía lo ha incluido como uno de los proyectos estratégicos para ejecutar en más largo plazo. El vicepresidente del Govern y conseller de Políticas Digitales y Territorio, Jordi Puigneró, ha subrayado que el Govern se ha dado de plazo hasta el verano para ver si el gobierno español tiene la voluntad de efectuarlo.

"Ponemos a disposición nuestra experiencia con FGC, nos hacen aptos para gestionar en un futuro las Cercanías del Estado en Catalunya", ha comentado Puigneró en declaraciones a los medios. El vicepresidente ha insistido en que el Govern esperará hasta el verano para ver qué voluntad tiene el Estado para concretar el traspaso. "No podemos continuar con este traspaso de feria de 2009, que no incluía vías, ni catenarias estaciones, personal ni financiación. Lo que queremos es la gestión integral de Rodalies", ha subrayado.

La compañía y el Govern se han suscrito el segundo contrato programa en un acto este lunes en el Museo Marítim de Barcelona, con la presencia del mismo Puigneró; el conseller de Economía y Hacienda, Jaume Giró, y la presidenta de FGC, Marta Subirà. El contrato prevé una inversión con recursos de la Generalitat de 1.000 millones de euros, con una aportación estable de recursos que siguen un crecimiento tendencial del 3,1%, sumado a las aportaciones de la ATM se calculan según el marco presupuestario acordado y los ingresos de los billetes. Según la compañía, los proyectos incluidos en el presupuesto no implicará un mayor endeudamiento.

Concretamente, las aportaciones de la Generalitat parten del contrato programa que ahora se agota (2017-2021), con unos 175 millones y un crecimiento anual del 3,1%, siguiendo las recomendaciones del Departamento de Economía. Se incluyen aportaciones adicionales finalistas para el déficit y a las inversiones de AMSA (estación de Boi Taüll), y para el déficit para los nuevos servicios Lleida-Manresa, a partir de 2024.

En total, para el año 2022 se prevén aportaciones totales de 371,5 millones (de los cuales 180 millones aportados por la Generalitat, 68,15 millones por la ATM y 118,7 millones procedentes de ingresos de la actividad), de 381,22 millones para el 2023; 403,01 millones para el 2024; 435,57 millones para el 2025 y 448,33 millones para el 2026. En cuanto a los ingresos, también se trabaja con un escenario de crecimiento del 3,1% anual, de acuerdo con la recuperación estimada en 2019 para 2022. En estas previsiones, se excluyen posibles impactos en la tarifa media que puedan tener la puesta en servicio de la T-Movilidad.

Las actuaciones más importantes

El presupuesto va destinado a cubrir las necesidades de financiación del ente FGC, que incluye las líneas del Vallès. Llobregat-Anoia. Infraestructuras Ferroviarias (IF) y Turismo y Montaña; y en las sociedades participadas como Vallter, AMSA, Autometro y Cargometro (las dos últimas, compañías de transporte de mercancías). Concretamente, FGC financia las inversiones de las dos primeras y el déficit de explotación es cubierto directamente por la Generalitat, mientras que las otras dos financian con sus propios ingresos.

Por otra parte, FGC Raíl, también participada, no ha generado todavía necesidades relevantes de inversión o financiación y se prevé que lo haga a partir de 2024 con la implantación de la línea Lleida-Manresa y asuma toda la explotación de la línea Lleida-La Pobla de Segur. En cuanto a las nuevas sociedades participadas –de las líneas R-Aeroport (FGC Movilidad) y del Tramo del Camp de Tarragona- el déficit será cubierto por la Generalitat y las inversiones con recursos de FGC. Una vez entren en funcionamiento, después de una capitalización inicial, se prevé que sean proyectos autocostaleros.

la descarbonización, el desarrollo territorial y la digitalización

FGC ha planteado el contrato programa con la Generalitat partiendo de tres ejes: la descarbonización, el desarrollo territorial y la digitalización. La compañía prevé que las inversiones se eleven hasta los 950 millones de euros en los próximos 10 años para sus proyectos estratégicos. Entre las actuaciones previstas en el primero de estos, hay varios proyectos estratégicos a corto y medio plazo. Dos de los más destacados –ambos en ancho ibérico- será la conexión entre Barcelona y el Aeropuerto del Prat (la futura R-aeroport) en torno a 2025 y la gestión de la línea de Rodalies Lleida-Manresa. Aparte, en la línea entre Lleida y la Pobla de Segur se incorporará un nuevo tren durante el primer semestre del año que viene.

Desestacionalizar las estaciones de montaña

En el segundo de los ejes, el desarrollo territorial, se trabajará con el objetivo de desestacionalizar las estaciones de montaña más allá de la temporada de verano; la implicación con el deporte y en especial con los Juegos Olímpicos de Invierno 2030; potenciar los ferrocarriles turísticos e impulsar la sostenibilidad con la instalación de puntos públicos de recarga para vehículos eléctricos en 2022.

Por último, en el ámbito de la digitalización, se prevé la implementación de las estaciones 4.0 y de 'resortes digitales'; y a nivel interno la entrada en servicio de agentes digitales, la incorporación de sistemas BIM y el desarrollo continuo del portal Open Data así como de un Laboratorio de 5G, entre otros.

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