Las psicólogas ven creíble a la menor que acusa de abusos a su abuelo

La Audiencia de Lleida acogió ayer el juicio contra un hombre acusado de abusar sexualmente de su nieta cuando esta tenía 13 años en Golmés. La víctima, que ahora tiene 16 años, relató en la vista que su abuelo había abusado de ella cuando fue a pasar unos días a la casa de este en Golmés el verano de 2018. Mientras, las psicólogas que atendieron a la víctima dieron credibilidad a su relato y destacaron que lo había explicado ante la insistencia de la madre al notar que la relación entre la nieta y el abuelo había cambiado.

Durante la vista, la víctima, que ahora tiene 16 años, explicó que el acusado aprovechaba los momentos en los que se quedaban a solas para hacerle tocamientos. Asimismo, declaró que una noche, mientras dormía en la cama con su hermano, su abuelo se acercó a ella, le hizo tocamientos e incluso le practicó sexo oral sin su consentimiento. “Intenté defenderme, hacerme la dormida para que me dejara en paz, pero no lo hizo”, afirmó.

La menor señaló que tardó en explicar lo que había pasado. “Primero se lo expliqué a un amigo y a mi psicológa. Después, se lo dije a mi madre, porque no quería ir más con mi abuelo y ella insistía en saber el por qué”, añadió.

Al respecto, la madre de la víctima e hija del acusado declaró que se enteró de los abusos en otoño de 2019. “Noté que mi hija esquivaba a su abuelo y me pareció extraño. La presioné hasta que, finalmente, me contó que había abusado de ella”, dijo.

Tanto la psicóloga del Equipo de Atención a la Víctima (EATAV), como la psicóloga de la víctima dieron credibilidad al relato de la denunciante. “Tenía un gran sentimiento de culpa porque no quería romper la relación de su madre con su abuelo”, señalaron. Las psicólogas añadieron que la víctima sufrió “indefensión” porque el agresor “era una persona de confianza”.

Por su parte, el acusado señaló en un principio que no recordaba nada y al final negó que abusara de su nieta. Una forense declaró que el acusado no tiene ninguna patología de salud mental diagnosticada, como alegaba la defensa. La Fiscalía mantuvo su petición de condena de 6 años de prisión, así como 6 años de libertad vigilada y que indemnice a la menor con 9.000 euros.