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El Palau recupera su iglesia con una primera misa tras dos años en obras
Los trabajos para consolidar la estructura del edificio han ascendido a 434.000 euros|| Los vecinos colaboran a través de una campaña para 'apadrinar' baldosas
La misa se llevó a cabo por la fiestas de Sant Blai y de la Candelaria.
El Palau d’Anglesola celebró ayer la reapertura de la iglesia de San Juan Baustista, cerrada durante dos años por obras. Los vecinos pudieron asistir a una misa enmarcada en los actos de celebración de las fiestas de Sant Blai. La ceremonia contó con representantes de las diferentes instituciones y entidades que han aportado fondos para sufragar los 434.000 euros que ha costado la rehabilitación del edificio: la Diputación, el obispado de Solsona, la Generalitat, el ayuntamiento y la parroquia.
Presidió la eucaristía el obispo de Vic y administrador apostólico de Solsona, Romà Casanova, acompañado de los párrocos de la comarca. También acudieron la vicepresidenta segunda de la Diputación, Estefania Rufach; el presidente del consell del Pla, Rafel Panadés. y el alcalde de El Palau, Francesc Balcells, entre otros.
La rehabilitación del templo se inició después de que, en agosto del 2019, se produjeran desprendimientos en su interior. Los trabajos desde entonces han consistido en reforzar el techo de la nave central y las laterales, instalando tensores entre las columnas para sujetar la totalidad de la estructura. También han eliminado las humedades y han recuperado los capiteles de las columnas.
Además de subsanar deficiencias, esta actuación ha permitido habilitar un lavabo adaptado para personas con movilidad reducida y una salida de emergencia. Uno de los últimos trabajos ha sido la colocación de baldosas, una acción que se ha llevado a cabo con la colaboración de los vecinos a través de la campaña Apadrina una baldosa. Son 850 piezas de gres de 60 centímetros de longitud y se pueden apadrinar por 20 euros cada una.
“Estamos contentos porque empezamos el pasado lunes y ya tenemos unas 130 baldosas apadrinadas” remarcó ayer Lorena Jurado, miembro de la parroquia y una de las impulsoras de esta iniciativa.Tras la inauguración, queda pendiente la mejora de la fachada y el campanario del edificio, que data de 1802. A lo largo de los dos últimos años, las misas y otros actos litúrgicos se han llevado a cabo en el pabellón polideportivo y el centro sociocultural.
