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Las estaciones de esquí que gestiona FGC tienen previsto abrir el 2 de diciembre, aunque la Molina lo podría hacer antes

Los complejos aplicarán medidas de eficiencia energética en función del estado de las pistas y la afluencia de visitantes

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Las estaciones de esquí y de montaña gestionadas por FGC Turisme tienen previsto dar la bienvenida a la temporada de invierno 2022-2023 el primer fin de semana de diciembre. Así, tanto Boí Taüll, como Espot, Port Ainé y Vallter trabajan para abrir el día 2. Mientras, la Molina también tiene previsto hacerlo en esta fecha, aunque se podría adelantar si las condiciones de nieve lo permiten. En el caso de Vall de Núria, el servicio del tren cremallera se reprenderá el 2 de diciembre y un día más tarde se pondrán en marcha el Parque Lúdico y las actividades de invierno. Además, si las condiciones acompañan, también se abrirá la estación de esquí. La idea aplicar medidas de eficiencia energética de forma variable, en función del estado de las pistas y la afluencia de visitantes.

En un año donde el contexto energético es más condicionante que en temporadas anteriores, el modelo que seguirán las explotaciones de FGC Turisme es el de estaciones "dinámicas". Así, se tomarán medidas de ahorro teniendo en cuenta varios parámetros, entre los cuales está también la calidad de la nieve y las condiciones meteorológicas. El objetivo se priorizar que la afectación hacia el usuario sea la mínima, según han explicado desde la compañía en un comunicado. De hecho, dentro del ámbito de la eficiencia energética, se ha conseguido una reducción de las emisiones de gases efecto invernadero del 66% y del consumo de agua de hasta un 26%.

Por otra parte, el proceso de digitalización en el sistema de forfaits ha permitido a las estaciones de esquí y montaña de FGC conocer el número y los movimientos de los visitantes en tiempo real. Por lo tanto, las medidas que se aplicarán pasarán para priorizar la producción de nieve en los periodos energéticos más económicos y cuando las condiciones de temperatura y humedad sean las más óptimas. También habrá un control exhaustivo de los grosores de nieve para no producir más de la necesaria. Además, se favorecerá la reducción del consumo de combustible de las máquinas de preparación de pistas, adaptándola a la calidad de la nieve. Otra de las posibilidades es modificar los horarios según la afluencia de esquiadores.

Una acción que han implementado las estaciones en los últimos años es la gestión de la iluminación, actualizando progresivamente la luminaria estándar por otra con tecnología LED. También hay un control de la temperatura en la calefacción de las dependencias y espacios comunes para alcanzar la máxima eficiencia energética. Con todo, se prevé que las estaciones acaben la temporada el lunes de Pascua, día 10 de abril.

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