Un trabajo de altura durante todo el año

Por mucho que parezca que las estaciones de esquí empiezan en noviembre la cuenta atrás, la preparación de la siguiente temporada es una tarea que comienza cuando aún hay esquiadores de la anterior en las pistas. Diseñar las ofertas comerciales, analizar las previsiones meteorológicas y prever la contratación de personal son algunas de las tareas que más ocupan a sus responsables.

Cuando las últimas nieves se funden y las estaciones apagan sus remontes, lo primero que hacen sus operarios es revisar las redes y otros elementos de protección como son las colchonetas. Las que tienen cotas altas descubiertas de bosque reparan también los paravientos de madera que hay en los márgenes de las pistas, que servirán para proteger la nieve del viento y acumularla, con el fin de disponer de ella para distribuirla después según las necesidades del dominio.

El desmantelamiento y la limpieza de los sistemas de producción de nieve, así como la reparación de posibles fugas de agua en las tuberías son otras de las tareas que más dedicación requieren. Sobre todo, en estaciones grandes como Baqueira, que con 700 cañones suma casi los mismos que el resto de complejos leridanos juntos. Cuando vuelva el frío y los cañones se monten de nuevo en sus respectivas arquetas, se aprovechará para renovar las bocas de aspersión por otras que vaporicen mejor el agua y sean más eficientes.

En cuanto a los remontes, en primavera se desmontan pieza por pieza para revisar su desgaste, mientras que el otoño se reserva para llevar a cabo las pruebas de carga y de frenado una vez han sido montados de nuevo. Para ello se usan recipientes llenos de agua o bloques de hormigón, que los ponen a su máxima capacidad.

También es el momento de probar los motores auxiliares, imprescindibles para evacuar la estación en caso de fallo eléctrico. Asimismo, los remontes deben pasar distintas pruebas dependiendo de su antigüedad, y cuando cumplen 25 años, como será el caso del telesilla de Tavascan esta temporada, deben pasar una revisión extraordinaria y exhaustiva supervisada por Territorio.

Por otra parte, se ha comprobado que una buena capa de vegetación ayuda a compactar la nieve. Es por ello que las estaciones procuran que sus pistas parezcan campos de golf los meses de verano.

Las mayores siembran sus montañas con camiones y tractores, mientras que otras más pequeñas como Tavascan optan por dejar pastar rebaños de ovejas en las pistas con el fin de abonarlas de forma natural. En este sentido, van moviendo el cercado para cubrir una mayor superficie.

Otra tarea importante reservada para el verano es la de despejar las pistas de piedras y ramas, tanto para la seguridad de los esquiadores como para que las máquinas pisa-nieves puedan trabajar mejor.

Port del Comte y Baqueira disponen de una máquina que tritura piedras, mientras que otras estaciones realizan esta tarea de forma manual. Paralelamente, algunas pistas son modificadas con el fin de cambiar su dificultad, mientras que otras se dibujan por primera vez.

Hacer acopio de sal y revisar la flota de vehículos son de los últimos elementos que se tachan en la lista antes de que la nieve vuelva a cubrir las montañas. Entretanto, los trabajadores que pueden disfrutan también de unos días de vacaciones.

Nueva moto de nieve y mejoras en el refugio

La estación de Tavascan, la única de titularidad municipal de esquí alpino de Lleida, ha adquirido para este año una moto de nieve para facilitar el desplazamiento del personal de mantenimiento y de rescates, así como un vehículo para limpiar la nieve.

También ha llevado a cabo actuaciones de mejora en el refugio de la Pleta del Prat, que tiene previsto abrir hoy sus puertas de la mano de nuevos gestores, para dotarlo de una mayor eficiencia energética; ha rehabilitado el almacén de alimentos y también ha reparado la impermeabilización de las terrazas.

Nuevo telesilla y más dominio esquiable

Con el nuevo telesilla del Dossau la estación alcanza los 170 kilómetros de dominio esquiable. Asimismo, estrena tres nuevas pistas: Montgarri, Passada d’Auba y Tortuga 2. Esta última sustituye la antigua Lenhadors, que ha sido remodelada para facilitar la bajada a los esquiadores de nivel medio.

Por otra parte, Baqueira ha adquirido tres nuevas pisa-nieves que se suman a las 15 que ya tenía y ha ampliado su red de innivación artificial, alcanzando unos 700 cañones con 769 arquetas donde instalarlos, con lo que cubre el 58% de su superficie.

Mejoras energéticas y en los sistemas de drenaje

La estación del Solsonès invirtió la pasada temporada 600.000 euros en cañones de nieve más eficientes. Este año, sus esfuerzos se han centrado en mejorar el sistema de recogida de aguas y una apuesta por las energías renovables, mediante la instalación de placas fotovoltaicas y recursos hidroeléctricos.

Asimismo, ha asfaltado un parking con capacidad para más de 200 vehículos y ha instalado más de 700 metros lineales de paranieves, además de consolidar taludes de sus pistas y construir muros para evitar la caída de piedras en el circuito.

Dos nuevas pistas y el Pla de Vaques, asfaltado

La estación en la Alta Ribagorça ha asfaltado el aparcamiento principal del Pla de Vaques, que cuenta con 730 plazas para vehículos de distintos tamaños, y han habilitado dos nuevas pistas en su mapa: Regalèssia y Carreretes. La primera, azul, cuenta con una longitud de 2.200 metros y un desnivel de 363 metros, mientras que la segunda, roja, mide 1.112 metros con un desnivel de 253 metros. En el ámbito deportivo, acogerá los Campeonatos del Mundo de Esquí de Montaña, que tendrán lugar entre el 27 de febrero y el 5 de marzo.

Mirador astronómico y parking de autocaravanas

Una de las grandes novedades de la estación es la instalación de un mirador astronómico cerca del Hotel Port Ainé para poder observar desde ahí las constelaciones.

Asimismo, ha asfaltado el aparcamiento de La Rabasta, con unos 9.000 metros cuadrados y con capacidad para 290 vehículos, y ha reservado unas 40 plazas para autocaravanas en dos zonas contiguas en el aparcamiento de Roní.

Por otra parte, una de las novedades de todas las estaciones que forman parte de Ferrocarrils es la de cobertura wifi estable en todo su dominio esquiable.

Mantendrán su horario y Tavascan instala paravientos

En cuanto a las pistas de Lleida que forman parte de la Mancomunitat d’Esquí Nórdic, que son Sant Joan de l’Erm, Aransa, Lles, Tuixent-La Vansa, Virós-Vall Ferrera y Tavascan, todas han llevado a cabo tareas para desbrozar sus pistas de nórdico y circuitos de raquetas así como talado árboles que se encontraban en los márgenes de estos.

La estación de Tavascan, en el Pallars Sobirà, ha instalado nuevos tramos de paravientos para acumular nieve y redistribuirla con la máquina pisanieves.

A pesar de que no han abierto aún sus instalaciones, todas prevén mantener el mismo horario que la última temporada, que es de 9 a 17 horas. Tavascan, de 9 a 16 horas.

Pista de ‘tubbing’ y otra máquina para forfaits

Espot Esquí ha instalado este año una pista de tubbing en el Parc Lúdic, en la cota 2.000 y junto a la zona de debutantes. También ha colocado una nueva máquina de venta de forfaits en la cota 1.500, con el fin de reducir colas a los visitantes para acceder a las pistas.

En cuanto a su agenda, Espot prevé acoger esta temporada los Mundiales FIS de paraesquí, donde deportistas de todo el mundo se desplazarán a esta estación del Pallars para competir en las disciplinas de descenso, supergigante, gigante y slalom.