Miles de esquiadores en las estaciones pese a que el viento cierra pistas a primera hora

Miles de esquiadores llenaron ayer las estaciones del Pirineo pese a que el fuerte viento, que alcanzó los 87 kilómetros por hora en el Sobirà, obligó a cerrar pistas a primera hora. En concreto, más de 8.000 personas acudieron a Boí Taüll, Espot, Port Ainé, Port del Comte y Tavascan. A estos hay que sumarle los que visitaron Baqueira, donde también se cuentan por miles.

Las nevadas de las últimas semanas han animado las reservas en los alojamientos del Pirineo. Desde Càmpings de Lleida explicaron que la ocupación en los bungalows del Pirineo se sitúa este fin de semana entre el 90% y el 100%. Por su parte, los hoteles de Aran, el Sobirà y la Ribagorça están entre el 85% y el 95%.

Fuentes de Ferrocarrils de la Generalitat de Catalunya (FGC) apuntaron que por la mañana el viento provocó el cierre de algunas pistas y cotas altas de Boí Taüll, Port Ainé y Espot. No obstante, las condiciones meteorológicas mejoraron y pudieron abrir las zonas clausuradas. Asimismo, Baqueira contaba ayer con 150 kilómetros de pistas y la estación aranesa acoge a partir de hoy el Freeride World Tour.

Mientras, Port del Comte registra el mejor fin de semana en cuanto a nieve con un total de 21 kilómetros de pistas abiertos. Tavascan también contó con una buena afluencia, del mismo modo que las pistas de esquí nórdico. Las bajas temperaturas se mantuvieron y los termómetros llegaron a marcar -12,1 grados en Salòria, -8,8 en Guixers y -6,6 en Raimat.

La previsión es que el frío no remita y Protección Civil tiene activada la alerta del plan Procicat por las bajas temperaturas. Ayer también eran necesarias las cadenas para circular por el puerto de la Bonaigua (C-28) y se registraron colas de hasta 5 kilómetros para acceder a Andorra desde La Seu.

Nieve y frío disparan el interés del turismo fotográfico en Lleida

La nieve y el frío de los últimos días han disparado el interés del turismo fotográfico en Lleida que busca, en este caso, plasmar los paisajes blancos y helados de las comarcas de montaña para divulgarlos a través de las redes sociales.

Según el responsable de promoción del Patronato de Turismo de la Diputación, Juli Alegre, este tipo de turismo es el mismo que persigue la imagen de los campos de frutales en floración en primavera o captar instantáneas de la berrea del ciervo en Boumort en otoño, un “ámbito que cada vez tiene más adeptos en Lleida”.