Cultura exige 150 millones de fianza por el mural del MNAC

La conselleria de Cultura de la Generalitat ha reclamado ante el juzgado de primera instancia número 2 de Huesca la imposición de una fianza de 150 millones de euros en el caso de que finalmente se ejecute de forma provisional la sentencia del pasado mes de julio en la que la magistrada Silvia Ferreruela ordenaba la restitución al monasterio de Sigena de las pinturas murales que conserva y exhibe el Museu Nacional d’Art de Catalunya (MNAC) en Barcelona. En este escrito, Cultura alega que los fragmentos de pinturas murales reclamados no se pueden trasladar por criterios técnicos ya que “perecerían” en el intento, como ya se informó en los últimos meses después de informes de especialistas.

Este escrito forma parte de una nueva batería de recursos de la Generalitat para oponerse a la ejecución de esta sentencia, que en su momento ya fue recurrida ante la Audiencia Provincial de Huesca y que se está a la espera de resolución. Así, en un segundo escrito se insta a la Audiencia de Huesca a modificar el auto en el que reconoció y legitimó al ayuntamiento de Villanueva de Sijena a reclamar la ejecución de la referida sentencia en torno a las pinturas murales. El argumento es que en este recurso municipal contra el MNAC también debía de formar parte la Generalitat como competente en materia de patrimonio cultural. Y en el tercer escrito presentado al juzgado, la Generalitat alega que, justamente como titular en materia de bienes patrimoniales, debe de ser tenida en cuenta su opinión en relación a la ejecución de la sentencia instada desde el consistorio altoaragonés.

‘Inspección’ del monasterio La nueva batería de escritos al juzgado oscense se produce una semana después de que la Generalitat pidiera también la autorización judicial para que dos técnicos propios –o en su defecto designados por el juzgado– puedan ‘inspeccionar’ las condiciones en las que se encuentran expuestas las piezas entregadas el pasado verano por el MNAC y que forman parte del litigio por la compra-venta de obras a las monjas de Sigena en los años 80 y 90, parte de las cuales se encuentran en el Museu de Lleida, y que son reclamadas también desde Aragón.