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Entrevista a Evru, artista

«Tengo más ideas que tiempo material para hacerlas»

Evru, artCieMist, creador de 'Dongda. La gran campana'

Unas 500 personas acudieron a la gala, que acabó con una cena.

Unas 500 personas acudieron a la gala, que acabó con una cena.SEGRE

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La Vinya dels Artistes de la bodega Mas Blanch i Jové, en La Pobla de Cérvoles, volvió a hacer este sábado honor a su nombre con la fiesta inaugural de ‘Dongda. La Gran Campana’, la última incorporación escultórica a este museo al aire libre en medio de olivos y viñedos imaginado por el artista Josep Guinovart y hecho realidad por Sara Balasch y Joan Bové. El artista escogido este año fue el barcelonés Evru, con obras en equipamientos como el MoMA de Nueva York o el Pompidou de París. Conoció la Vinya y se enamoró de ella.

Se define como ArtCieMist, suma de artista, científico y místico y este sábado se convirtió en el protagonista de la fiesta del Any 7 de la Vinya dels Artistes, de la bodega Mas Blanch i Jové de La Pobla de Cérvoles. No en vano, su obra, Dongda. La Gran Campana, acompaña desde ahora a Esclat (2016) de Frederic Amat; Enmarcant el somni: diàleg (2015) de Assumpció Mateu; Signatures número 1 (2014) de Susana Solano; Cap de Bou (2013) en honor a Joan Brossa; La llum (inclinada) sobre la terra (2012) de Esteve Casanoves; La sargantaneta (2011) de Carles Santos y, el génesis, Orgue de camp (2010) de Josep Guinovart.

Evru nació como Albert Porta (hasta 1968), más tarde fue Zush (de 1968 a 2001) y renació en 2001 como Evru (Evrugo Mental State). Tiene un estado, un lenguaje y un alfabeto propio que están perfectamente reflejados en esta campana de 300 kilos de bronce y que este sábado también pudieron conocer los asistentes.

¿Cómo conoció la Vinya y qué le inspiró cuando paseó por allí?

La conocí a través del artista Frederic Amat y me pareció algo fantástico. Era museo al aire libre entre viñedos y olivos y enseguida pensé que me encantaría tener una pieza allí. Además, creo que de alguna forma esta creatividad también se transmite al vino que produce esta bodega.

¿Por qué ‘Dongda’?

Es una campana de bronce recubierta de protuberancias como si fuese un archipiélago, en la que en cada pequeño núcleo está grabada una letra del alfabeto evrugi, inventado por mí, y el conjunto de islas compone todo mi alfabeto. Pensé que colgada de un árbol quedaría fantástica, porque en un lugar pequeño o más cerrado hace demasiado ruido.

¿Qué representa?

Las campanas son para anunciar cosas, y esta tiene una cara como en estado de éxtasis, de placer. Pensé que si la colocábamos aquí, al tocarla dará buenas vibraciones a todo el viñedo y, de alguna forma, a todo el universo ya al mundo, por el llamado efecto mariposa. Aunque no lo escuches, te llegarán las buenas vibraciones.

¿Está colocada estratégicamente?

Sí la hemos instalado un poco escondida para que se pueda tocar pero no sea invasiva. Es una fruta más dentro de un bosque.

¿Cómo se inspira Evru?

Es difícil de explicar, pero hace años que dije que cuando me despierto, ya las arrugas de las sábanas de la cama me inspiran a crear. La inspiración es algo muy abstracto, pero en mi cabeza existen más ideas que tiempo material de hacerlas. Ahora no trabajo, acumulo ideas para después materializarlas.

¿Usted se define como un creador que mezcla arte, ciencia y mística. ¿Cómo se consigue?

Creo que todo el mundo es creativo. Por ejemplo, cocinando tienes que saber de ciencia para no mezclar el aceite con el agua y que no te explote. Si hacemos una tortilla, queremos que sea la mejor del mundo, y ya le ponemos nuestro espíritu, nuestra alma y creatividad: un día le pondremos perejil, otro no, etc. De alguna forma todos tenemos esta trilogía de espíritu, técnica y creatividad.

Fiesta en la Vinya dels Artistes con más 500 personas para dar la bienvenida a la pieza Unas 500 personas se dieron cita este sábado en la fiesta del Any 7 de la Vinya dels Artistes, en la que Sara Jové ejerció de maestra de ceremonias, en un acto que contó con Salvador Puig, director del Incavi, entre otras personalidades. Una vez Evru hubo desvelado el “alma” de Dongda con el sonido de la campana de fondo, los asistentes pudieron disfrutar de una cena al aire libre entre viñedos, con música de campanas tibetanas de fondo. El DJ Fernando Lagreca animó el fin de la noche.

Unas 500 personas acudieron a la gala, que acabó con una cena.

Unas 500 personas acudieron a la gala, que acabó con una cena.SEGRE

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