Reivindicando el ADN 'rambo' de Indíbil

Un enorme lazo amarillo presidió ayer la lección inaugural del curso 2017/18 del IEI. De hecho, el encarcelamiento de medio gobierno de la Generalitat había obligado a aplazar el acto. “No aceptaremos bajo ningún concepto que vía decreto se aniquile aquello que forma parte de la esencia de un país, como son las instituciones: el Parlament y el Govern y se encarcele a medio gobierno”, advirtió el presidente de la Diputación, Joan Reñé. Pero a pesar del complejo momento político, Francesc Canosa, “explicador de cosas”, según definición propia, se encargó de inyectar una buena dosis de autoestima con su conferencia La terra es (des)ferma: d’Indíbil a Alexandra. El escritor y periodista de Balaguer reivindicó el ADN ilergeta, que inició “el R+D en agricultura” y, a la vez, fue capaz de enfrentarse a las dos grandes potencias de su época: Roma y Cartago. “Indíbil y Mandoni son nuestros rambos”. Perdieron, pero “son los héroes morales”.

Y pasó el tiempo y de nuevo el ADN de Indíbil. “El Comtat d’Urgell rompió el contrato basura que le unía a los francos y se autodeterminó”. La Lleida de hoy “es el Comtat d’Urgell”, pero con una salvedad: “ya no hablamos de tú a tú a Barcelona. En la Edad Media la balanza se equilibraba y el hombre más rico y poderoso de la corona después del rey era el Comte d’Urgell”. Para Canosa, que prepara un libro sobre el tema, en la derrota de Jaume d’Urgell en el Compromís de Casp, hay que buscar el origen del conflicto de Sigena. “Es la metáfora del fracaso de la Pell de Brau, de los puente de diálogos que pedía Salvador Espriu”. Porque era el Comtat d’Urgell el que financiaba el monasterio. El sepulcro de Isabel, hermana del último conde, es una de las 44 piezas que Aragón reclama al Museu de Lleida.

Pero los leridanos “son profesionales de la resurrección” y se inventaron un futuro “vía H2O” para iluminar el país con las centrales hidroeléctricas del Pirineo. Como hicieron su propia conquista del oeste con la épica construcción del Canal d’Urgell que convirtió Ponent “en la despensa del país”. Y aún faltaba llegar al “kilómetro 0 de la Catalunya-Estado”, que fue la Mancomunitat y que promovió el mítico viaje de Sala Roqueta a California del que surgió la primera gran finca de fruta dulce que empezó a vestir el paisaje “con el mantel de colores de los frutales en flor”, recientemente redescubiertos como atractivo turístico. “Haciendo un símil informático, hay que descargar Lleida para instalarla”, porque ya es hora de que “los héroes morales” ganen. Y del ADN de Indíbil surja un futuro para Alexandra, la hija de tan solo un mes y medio de Canosa.

Reñé apuesta por el “apoyo cultural al territorio” en el 75 aniversario

Es un curso atípico para bien y para mal. El presidente de la Diputación, Joan Reñé, recordó ayer que a pesar del momento político “inaceptable”, el IEI se encuentra inmerso hasta marzo “en la celebración del 75 aniversario” y avanzó que se organizará un congreso dedicado a la piedra seca y se presentará un documental con testimonios de la ruta Perseguits i salvats, que recuerda el paso de miles de judíos por el Pirineo para huir del horror nazi. También se invertirán casi cuatro millones de euros para recuperar y preservar el patrimonio del Pla de Lleida (ver página 15). Pero, sobre todo, “se dará apoyo al territorio” para que los proyectos culturales tengan recorrido.