Operación Sigena: segunda parte

Casi un mes y medio después del show policial con el que el gobierno de Aragón se llevó del Museu de Lleida 43 obras del monasterio de Sigena aprovechando el ‘vacío’ en la Generalitat por el artículo 155, ayer culminó la operación con la entrega del cuadro que faltaba en el lote, una Inmaculada del siglo XVIII que se encontraba en el Palau Episcopal del obispado de Lleida desde los años setenta. A diferencia del pasado 11 de diciembre, la expectación pública fue nula: ni Guardia Civil rodeando el edificio, ni Mossos d’Esquadra cortando el tráfico, ni políticos ni manifestantes protestando ante las puertas del Museu. Solo una furgoneta con dos operarios y una técnica del gobierno aragonés que, en menos de una hora, embalaron la pintura y la trasladaron al vehículo en una caja antes de partir en dirección al monasterio oscense. La única expectación la pusieron hasta una veintena de periodistas y reporteros, algunos llegados desde Huesca y Zaragoza. Desde el Museu de Lleida quisieron cerrar esta ‘carpeta’ en silencio, sin declaraciones, en espera de tiempos y resoluciones judiciales mejores. No fue el caso desde Aragón. El presidente autonómico, Javier Lambán, aseguró que la “batalla” por el arte aragonés “no cesa” y se mostró confiado en que “paso a paso la recuperación patrimonial se producirá”, recordando también las pinturas murales del MNAC. La consejera de Cultura, Mayte Pérez, lamentó que “hayamos tenido que volver a ir a por la pieza”, cuando “debería haber sido el museo, el ministro y la Generalitat quienes nos la deberían haber enviado”, y cifró esta acción en “más de 20.000 €”.

Por otro lado, ‘aprovechando’ la jornada se insistió en que el obispado de Barbastro presentará en las próximas semanas en los juzgados de esta localidad oscense una demana reclamando el centenar de obras en litigio de las parroquias de la Franja, que se conservan en el Museu de Lleida. El hecho de que una veintena de las piezas sean originarias de la catedral de Roda de Isábena es una de las razones por las que el equipo jurídico del obispado aragonés presentará la demanda en el juzgado oscense y no en el de Lleida.

Lleida

El Museu Nacional d’Art de Catalunya (MNAC) depositará próximamente en el Museu de Lleida una de las tablas que formaban parte del retablo mayor del monasterio de Sigena, del siglo XVI, una obra que se encuentra totalmente dispersa después de desmontarse y venderse a piezas (mas de una treintena) a anticuarios y coleccionistas. De hecho, el museo leridano ya conserva cuatro de estas piezas, dos tablas y dos fragmentos de la predela del retablo (la base). Como ya avanzó a SEGRE el director del Museo de Lleida, Josep Giralt (entrevista publicada el pasado domingo), la remodelación de diversos espacios del MNAC y el acuerdo con sus responsables propiciará la llegada a Lleida de esta tabla del Maestro de Sigena dedicada a la escena bíblica de Jesús entre los doctores de la ley. La pieza formará parte del renovado discurso histórico-artístico que se está preparando para llenar el ‘vacío’ dejado tras el traslado a Sigena de las cajas sepulcrales de finales del gótico, que se exhibían en la exposición permanente del Museu, junto con los cuatro fragmentos escultóricos de alabastro de Joly. Giralt señaló al respecto que antes del próximo mes de mayo se completará la remodelación de las zonas en las que se exponían las obras que se han llevado a Sigena.