SEGRE

PATRIMONIO RELIGIOSO

Sant Ramon recupera un Cristo destruido por un rayo en 1970

La comunidad religiosa de Sant Ramon, con el sacerdote, monjes y novicios, junto al Cristo recuperado.

La comunidad religiosa de Sant Ramon, con el sacerdote, monjes y novicios, junto al Cristo recuperado.XAVIER SANTESMASSES

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Un novicio de Sant Ramon, Alejandro Pérez, natural de Zamora y licenciado en Bellas Artes por la Universidad de Salamanca, ha restaurado un calvario de la Escola de Olot de principios del siglo XX que encontró en uno de los almacenes del santuario de la Segarra. Se trata de un conjunto escultórico de madera y yeso presidido por un Cristo crucificado que quedó muy deteriorado cuando un rayo cayó sobre el santuario durante una tormenta en 1970, que afectó a buena parte del templo. De momento, en tres meses Pérez ha recuperado el Cristo, que ahora luce frente al altar mayor y que será ‘estrenado’ oficialmente el próximo Viernes Santo en un viacrucis en Montfalcó Murallat.

Según el historiador y sacerdote de los mercedarios Joaquín Millán, los destrozos tuvieron lugar la madrugada del 9 de diciembre de 1970. A resultas de un rayo se rompieron las vidrieras, quedó levantado parte del suelo del santuario y se destruyeron buena parte de las imágenes del templo, entre ellas el Calvario que estaba ubicado en la actual capilla de Santa Llúcia. Los desperfectos causaron destrozos por valor de 200.000 pesetas de la época que, según Millán, sufragaron los mismos vecinos de Sant Ramon. El santuario cuenta con una comunidad religiosa de tres monjes y un sacerdote. Desde hace una década cuenta también con media docena de novicios que durante 365 días comparten sus estudios con el mantenimiento del histórico edificio dedicado al santo de la Segarra. Por el santuario pasan cada año pasan más de 10.000 turistas y peregrinos.

Restauran también una talla de la Virgen Alejandro Pérez también ha iniciado la recuperación de la talla de la Mare de Déu dels Dolors que, a diferencia del Cristo –para el que solo se remodelaron y repintaron las extremidades–, estaba muy deteriorada, con la cabeza y parte del cuerpo partidos. Se sabe que había también una escultura de Sant Joan, pero se ha perdido: “Quedó totalmente destruida por la tormenta”, explica Pérez.

La comunidad religiosa de Sant Ramon, con el sacerdote, monjes y novicios, junto al Cristo recuperado.

La comunidad religiosa de Sant Ramon, con el sacerdote, monjes y novicios, junto al Cristo recuperado.XAVIER SANTESMASSES

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