Ciutadilla consolida los restos del antiguo convento dominico

El ayuntamiento de Ciutadilla ha finalizado la segunda actuación arqueológica en el antiguo convento dominico del Roser, que data del siglo XVI y que ha permitido consolidar los restos. Ahora, el consistorio busca fondos con carácter urgente para una tercera fase con la que proteger los fundamentos del agua de la lluvia y hacer visitables los restos. El alcalde, Òscar Martínez, explicó ayer que la actuación llevada a cabo en los últimos cuatro meses se ha centrado en limpiar y consolidar la nave principal del edificio y las dos capillas laterales y recuperar una pequeña cripta subterránea y las escaleras de acceso.

También se han recuperado diferentes elementos escultóricos y ornamentales en buen estado de conservación. Entre ellos, hay 6 claves de bóveda con una heráldica muy trabajada. La intervención arqueológica ha contado con un presupuesto de 21.000 euros, financiado por el Institut d’Estudis Ilerdencs (IEI) y fondos propios del ayuntamiento, yendo a cargo de Arqueòlegs.cat y Construccions Muñarch. El primer edil destacó la importancia de recuperar este elemento patrimonial. Según Martínez, “la historia del convento del Roser está totalmente ligada a la del castillo y del pueblo, de modo que es un activo más del patrimonio de Ciutadilla y de la Vall del Corb, definiendo a la perfección la influencia y el poder del territorio en el siglo XVI”. La primera fase arqueológica en los restos del antiguo convento se llevó a cabo durante el año 2015.

El alcalde explicó que hicieron “una pequeña prospección que mostró que había más elementos de interés patrimonial de los que teníamos constancia, ya que se encontraba en ruinas y cubierto de vegetación”. El convento dominico del Roser fue fundado por Gispert de Guimerà y se construyó entre 1582 y 1587. Tras la desamortización, quedó abandonado y en 1845 fue arrendado como un hostal.

A finales del siglo XIX ya se encontraba en muy mal estado. En los años 30 del siglo XX se hundió la nave principal del convento, que fue expoliado pasado un tiempo. El 1956 se retiraron algunas piedras, usadas para reconstruir el campanario de la iglesia de Sarral, y la portada original se llevó a Reus. Esta ahora se expone en el Institut Gabriel Ferrater i Soler. Del convento del Roser de Ciutadilla procede también el sepulcro de Gispert de Guimerà, depositado en el MNAC.