'Game of Thrones' vuelve al ruedo

Game of Thrones extendió el lunes su imperio televisivo al ganar el máximo galardón de los Emmy, mientras que la primera temporada de The Marvelous Mrs. Maisel arrasó en la categoría de comedia de los premios más importantes de la pequeña pantalla. La noche resultó amarga para candidatos latinos como la madrileña Penélope Cruz o Édgar Ramírez, que se fueron con las manos vacías, aunque también contó con momentos tan dulces y románticos como una sorprendente pedida de mano sobre el escenario por parte de uno de los ganadores (ver desglose). Con nueve premios en la 70 edición de los Emmy, la serie de fantasía épica de HBO Game of Thrones amplió hasta las 47 estatuillas su récord absoluto en estos galardones, en los que es la producción más premiada de la historia. Y es que, tras ausentarse en la pasada edición a causa del retraso de su séptima temporada, este año ha regresado por la puerta grande, sumando su tercer premio como mejor la mejor serie dramática.

Claire Foy, que interpreta a la reina Isabel II en The Crown, dio la sorpresa como mejor actriz al destronar a Elisabeth Moss de The Handmaid’s Tale, que en contra de las predicciones acabó siendo una de las derrotadas de la velada. Por su parte, Matthew Ryhs otorgó la mejor despedida posible a la serie de espías The Americans al llevarse el premio al mejor actor dramático, que dedicó a su pareja en la vida real y en esta producción, Keri Russell. Como una apisonadora pasó por las categorías de comedia The Marvelous Mrs. Maisel, que cuenta la historia de un ama de casa en 1958 en Nueva York que descubre que tiene una habilidad especial para la comedia en vivo y que se llevó premios en las secciones de mejor serie, mejor actriz protagonista (Rachel Brosnahan), mejor actriz de reparto (Alex Borstein), mejor dirección y mejor guion (ambos para Amy Sherman-Palladino). El sarcasmo y la ironía descorcharon la noche por medio de una canción titulada Lo solucionamos, acerca de los problemas de falta de diversidad en la industria de Hollywood. En esta línea, la ceremonia contó con unos premios ficticios Emmy de la reparación, que reconocieron la labor de actores negros que no habían sido galardonados. En la primera gala tras el terremoto de escándalos sexuales, los presentadores Colin Jost y Michael Che dieron la bienvenida a los talentos de Hollywood “que no han sido pillados todavía”.

El director Glenn Weiss propone matrimonio a su novia en plena gala Glenn Weiss, que obtuvo el Emmy a la mejor dirección de un especial de variedades por la última ceremonia de los Oscar, protagonizó el episodio más romántico de la velada junto a su pareja, Jan. Weiss, que había recordado a su madre recientemente fallecida, pilló por sorpresa al teatro cuando le propuso matrimonio a Jan. “Jan, eres la luz de mi vida. Pero no me gusta llamarte mi novia porque quiero llamarte mi esposa”, dijo Weiss, antes de llamar al escenario a su pareja, visiblemente emocionada. Todo el audiotorio aplaudió mientras el director se arrodillaba y le hacía la petición de matromonio con anillo incluido, a la que la novia contestó con un “Sí”.