SEGRE

POLÍTICA CULTURAL PATRIMONIO

Luz verde a las obras en la Seu Vella

El Govern autoriza 1,78 millones de euros para restaurar la Porta dels Apòstols, las cubiertas del claustro y el campanario || La previsión es comenzar los trabajos en otoño y acabar en 2021

La Porta dels Apòstols, junto al campanario, dos de los espacios de la Seu Vella que se restaurarán.

La Porta dels Apòstols, junto al campanario, dos de los espacios de la Seu Vella que se restaurarán.ÓSCAR MIRÓN

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El Consell Executiu de la Generalitat autorizó ayer una inversión de 1.788.960 euros para la contratación de las obras de restauración de la Porta dels Apòstols, el campanario y las cubiertas del claustro de la Seu Vella, una actuación que, de cumplirse las previsiones, podría comenzar a principios del último trimestre de este 2019, en otoño, y se alargaría hasta mediados del año 2021. Los trabajos darían inicio así con dos años de retraso respecto al proyecto inicial, que quedó totalmente frenado en 2017 tras la intervención de la Generalitat por parte del Estado en virtud de la aplicación del artículo 155. De hecho, en esta triple intervención en el conjunto monumental también estaba prevista una partida del Estado, que en principio era de 400.000 euros; que en enero, en el proyecto de Presupuestos del Gobierno, quedó en 200.000; y que ahora, tras las elecciones generales y a falta de formarse el nuevo Ejecutivo y aprobarse unos futuros Presupuestos, está en el aire.

En la Porta dels Apòstols, uno de los elementos más emblemáticos del monumento, situada en la fachada de poniente del claustro, se actuará en la portalada con la protección de la piedra y el freno a los procesos de degradación de la misma, además de la cubierta de la propia fachada, erosionada por el efecto del agua de lluvia, las bajas temperaturas y la vegetación. Los trabajos estaba previsto que costaran en torno a los 600.000 euros.

La inversión arrancará con dos años de retraso por culpa de la intervención de la Generalitat por el 155

En las cubiertas del claustro, igualmente muy castigadas por las filtraciones del agua de lluvia, que también afectan a las bóvedas de esta construcción, se prevé la mejora de la función de permeabilización, protección y evacuación correcta del agua. Pese a que quizás es uno de los desperfectos menos visibles a ojos de los visitantes, sí que es uno de los que más dañan al monumento. El presupuesto inicial de 1 millón de euros debía repartirse entre 600.000 de la Generalitat y 400.000 del Estado. Finalmente, en el campanario, tras la restauración de las fachadas exteriores que se estrenó en 2013, se actuará en el templete superior, con sus elementos constructivos y escultóricos singulares, y en los pisos que alojan las campanas, con un coste aproximado de medio millón de euros.

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