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ARTE ESCULTURA

Antoni Llena, en la Vinya dels Artistes

Exposición de Antoni Llena en 2005 en las salas del Museu Morera de Lleida.

Exposición de Antoni Llena en 2005 en las salas del Museu Morera de Lleida.MAGDALENA ALTISENT

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Está considerado uno de los artistas conceptuales más relevantes de Catalunya y a partir del próximo verano se unirá al elenco de creadores que forman parte de una de las propuestas escultóricas más originales del país: la Vinya dels Artistes, de la bodega Mas Blanch i Jové de La Pobla de Cérvoles. Antoni Llena (Barcelona, 1942) ha sido el escogido para protagonizar el Any 10 de la Festa dels Artistes que desde 2010 organiza cada año esta bodega de Les Garrigues. Cada mes de julio, un creador de relevancia contrastada plasma con una escultura al aire libre qué le ha inspirado este singular campo de viñedos y olivos que en su momento imaginó Josep Guinovart.

Llena apuesta por no desvelar todavía qué pieza creará. “Tengo la idea, el lápiz y el lugar, pero todavía no he hecho el dibujo, y hasta que no lo haya materializado no sabré si queda bien o no, así que prefiero no revelarlo”, afirma con voz entre juguetona y misteriosa. Sí que tiene claro el lugar. “Lo haré en una especie de cabaña en ruinas en la que ha entrado la vegetación, está escondida y casi no se ve. Es un espacio perfecto”, asegura entusiasmado. Llena conoció La Vinya dels Artistes cuando sus propietarios, Joan Jové y Sara Balasch, le invitaron a visitarla y a participar en el museo al aire libre en el que la han convertido. “Cuando vi su amor por la tierra, los viñedos y el arte, no tuve dudas. Y el súmmum ya llegó cuando encontré este lugar”, explicó.

Llena expuso por primera vez en Lleida (ver desglose). Su obra se ha considerado siempre como una reivindicación del hecho de pintar y nunca ha trabajado de forma convencional. Este verano lo recordará en La Vinya.

Su primera exposición, en Lleida Llena expuso por primera vez en la emblemática Petite Galerie de Lleida, impulsada por Jaume Magre. Era 1968 y fue considerado todo un revolucionario. Eso sí, casi por casualidad. Según explicó él mismo a SEGRE, aunque parezca increíble, la vergüenza y la timidez tuvieron mucho que ver. “Yo llevaba unas esculturas en una caja y cuando llegué allí me parecieron horribles, así que, como no sabía qué hacer, dibujé las sombras y expuse solo las sombras de las esculturas. Este acto fue considerado un hito del inicio del arte conceptual en este país”.

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